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El productor, que espera el comienzo del juicio por abuso sexual, fue demandado por la actriz Rose McGowan, que ya lo había denunciado por violación
Harvey Weinstein, que a partir del 6 de enero se enfrentará a un juicio acusado de abuso sexual, volvió a ser noticia en las últimas horas.
Por un lado, la actriz Rose McGowan, que fue una de las que inició el movimiento Me Too cuando en primera instancia denunció al entonces magnate de Hollywood, por acoso sexual, volvió a demandarlo a él y a sus antiguos abogados, Lisa Bloom y David Boies.
McGowan los acusa ahora de haberla espiado e intimidado para que no pudiera publicar sus memorias en las que, está claro, abordaba la violación que sufrió por Weinstein en 1997.
Según McGowan, después de haber hecho la primera denuncia contra el productor, en 2017, él y su equipo contrataron a una agencia de detectives para monitorearla, interferir su teléfono y tener acceso a su computadora y, por ende, a las memorias que estaba desarrollando. “Este caso se trata de un esfuerzo diabólico e ilegal de uno de los hombres más poderosos de Estados Unidos y sus abogados para silenciar a las víctimas de agresión sexual”, declaró la intérprete a Hollywood Reporter.
A propósito, McGowan también publicó en su Instagram que “si empiezan a leer cosas horribles de mí” en las redes, “entiendan que es probable que se les pague a bots para dañar mi reputación. Si empiezan a leer sitios que publican basura sobre mí, sepan de dónde viene, de un violador acusado” y su equipo. “Créanme”, pidió la actriz, que se definió como “una buena persona que pelea por los que no tienen voz”.
En paralelo, dos actrices protagonizaron un incidente en un club de Nueva York al enfrentarse a Weinstein, a quien llamaron “violador”, según un video que se hizo viral. Weinstein acudió la noche del jueves a un club que una vez al mes brinda un espacio para que artistas emergentes muestren su talento, el Actor’s Hour.
Durante el show, una comediante, que estaba en el escenario hizo notar la presencia de Weinstein, a quien acto seguido llamó “elefante blanco”, expresión utilizada para referirse a una posesión indeseada, y “Freddy Krueger”, personaje de una película de terror. “No sabía que teníamos que traer nuestro propio gas pimienta y los silbatos de violación al Actor’s Hour”, dijo la comediante, cuyo comentario fue recibido con abucheos, en su mayoría de hombres, y un sonoro “cállate”, según un video que fue subido a Instagram y demás redes sociales.
Keep getting new followers today is it because my tweets are so fire? lol fuck Weinstein and thanks @ambercrollo ILY #mysecondtweet pic.twitter.com/hLjWn5VM8Y
— Kelly Bachman (@bellykachman) October 24, 2019
La actriz dijo a BuzzFeed News que había tenido pesadillas sobre Weinstein y que verlo entre el público fue “una pesadilla hecha realidad”. Entre el público estaba también la joven actriz Zoe Stuckless, quien, aseguró en su cuenta Facebook, al ver que Weisntein reía, aplaudía y bebía, se paró frente a la mesa donde estaba el productor y se enfrentó a él. “¡¿Nadie va a decir nada?! Me voy a parar a un metro de un violador y ¿nadie va a decir nada?”, gritó Stuckless.
Weinstein, que estaba acompañado por cuatro mujeres y dos guardaespaldas, permaneció sin ninguna reacción.
Hey all, I know I’m late to the conversation here. I don’t usually use twitter but it seems like that’s where a lot of this conversation is happening. Last night I confronted Harvey Weinstein in a bar along with a number of other artists. Heres the thread (1/?) #HarveyWeinstein pic.twitter.com/L8Oee5hAO7
— Zoe Stuckless (@revoltchild) October 25, 2019
Un portavoz del productor dijo a TMZ que Weinstein “había salido con amigos para disfrutar de la música y tratar de encontrar algo de consuelo en su vida, que quedó al revés”. “Esta escena no era necesaria, fue francamente grosera y un ejemplo de cómo el público está aplastando el debido proceso hoy”, señaló el vocero.