Publicidad

Camilla Läckberg, la exitosa autora sueca de novelas policiales, y su vida en pandemia

Compartir esta noticia
Camilla Läckberg

Entrevista

La escritora charló con El País sobre su nueva novela, "Mujeres que no perdonan", y de cómo pasa sus días en tiempos de coronavirus

Con novelas como Una jaula de oro, La princesa de hielo y La bruja, Camilla Läckberg se convirtió en una de las más exitosas firmas de la ola de policiales nórdicos. Nacida en Fjällbacka, la ciudad sueca en la que transcurre una buena parte de su obra, Läckberg tiene nueva obra, Mujeres que no perdonan en la que retoma algunas ideas de sus novelas anteriores concentrándose en la venganza de tres mujeres que viven una vida oprimida y tienen todo para librarse de ellas con un crimen perfecto. Sobre eso y la inspiración en tiempos como estos, Lackberg, quien estuvo en Uruguay en 2018, charló con El País.

—¿Qué ha hecho durante la cuarentena?

—Mi propia vida no cambió mucho, ya que estoy en casa escribiendo en pijama la mayor parte del tiempo de todos modos.

—Una cuarentena también es el escenario ideal para una de sus novelas, ¿se ha inspirado en este tiempo para escribir algo sobre este asunto?

—La pandemia y el posterior bloqueo que tuvo lugar en muchos países me han inspirado. Sin embargo, lo que surgió durante este tiempo fue en realidad un guion para una película en lugar de una novela. De hecho, ya hemos filmado un avance de ese guion y fue una de las experiencias más divertidas de mi vida.

—En Mujeres que no perdonan no hay investigadores o un caso para resolver, pero la mirada está en estas tres mujeres que planean un crimen. ¿Por qué ese cambio de perspectiva?

—No quería escribir otra novela policial. Esta fue una oportunidad para mí de explorar la psicología detrás de la venganza y el asesinato de una manera diferente a mis otras novelas. ¡Me divertí mucho escribiendo sobre Ingrid, Birgitta y Viktoria!

—Es una novela de empoderamiento femenino, ¿qué le inspiró a escribir este libro?

—Siempre he querido explorar la idea de la amistad femenina y la hermandad. Simplemente no quería hacerlo de una manera agradable y amenazadora, sino algo oscuro y que rompa las normas. El poder femenino en su forma más extrema.

—La venganza de una mujer sufrida que busca su libertad ya estaba en La jaula dorada, ¿qué cambios hay en las mujeres que matan?

—El enfoque en esta novela es la hermandad. Eso lo distingue de La jaula dorada, donde el viaje de Faye está en el centro de la historia. En Mujeres que no perdonan quería explorar hasta dónde podía llevar a dicha hermandad y cuán oscura podía permitir que se volviera sin perder la simpatía por mis personajes. Ingrid, Viktoria y Birgitta son esencialmente extraños entre sí, sin embargo, sus experiencias y objetivos comunes los unen y forman un fuerte vínculo. Eso es fascinante para mí.

—Es una novela corta comparada con las que has escrito últimamente, y también más oscura debido a su trama, ¿a qué se debe eso?

—He tenido estas historias en mí durante mucho tiempo y con Faye y La jaula dorada me dio el coraje de seguir explorando mi autoría en diferentes direcciones y formatos, como con esta novela.

—¿Cómo surgen estos tres personajes centrales de la novela?

—Ingrid, Victoria y Birgitta comenzaron a emerger cuando estaba considerando cómo podrías cometer el asesinato perfecto. Luego, mis pensamientos me llevan a explorar por qué alguien cometería un crimen como ese y lentamente los personajes comenzaron a desarrollarse. Fue la idea de decir que ya es suficiente. Las tres mujeres tienen parejas con ideas similares sobre lo que significa ser poderosa. Los hombres piensan que se vuelven más fuertes empujando a otras personas, cuando esta es su mayor debilidad que pueden explotar Ingrid, Viktoria y Birgitta.

—Acá abandona su escenario tradicional, Fjällbacka. ¿por qué?

—La serie en Fjällbacka es su propio mundo. Ambientar Mujeres que no perdonan allí no hubiera funcionado, no de la forma en que quería contar las historias de Ingrid, Birgitta y Viktoria.

—¿Qué es lo primero que le surge al escribir, la forma de matar o los personajes que asesinarán?

—Siempre tengo una idea de lo que quiero escribir y cómo quiero que termine, pero exactamente cómo se desarrolla es algo que se me ocurre al escribir. En general escribo sobre las cosas que más me asustan, supongo que es una forma de lidiar con esos miedos. Entonces, técnicamente, los crímenes son lo primero y el resto se desarrolla a partir de ahí.

—Los suecos tienen una cultura de la muerte que se refleja en el éxito de las novelas policiales y también en sus películas. ¿A qué se debe?

—Suecia es tradicionalmente un país muy seguro, hemos tenido una buena estructura social, no hemos estado en ninguna guerra mundial y no ha habido mucha pobreza en los últimos cientos de años. Todo eso combinado ha permitido a los autores suecos la libertad de pensar en crímenes locos y tramas de suspenso que tienen un impacto adicional en el contexto del bienestar general en el país.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad