REPERCUSIONES

Natalia González se convirtió ayer en la nueva maestra de la cocina de MasterChef Uruguay, certamen que emitió Canal 10 y tuvo como jurados a Ximena Torres, Sergio Puglia y Laurent Laine.

Natalia, de solo 21 años, nacida y criada en Tala (Canelones), se acercó a la cocina a través de su abuela, cuando ella tenía nueve o diez años, dice con mucha emoción a El País apenas se anunció su victoria. De ella conoció técnicas y recetas, y es de quien tomó el gusto por cocinar.

Con los años, esa pasión se extendió a través de canales de televisión donde figuras como Dolli Irigoyen fueron enseñándole, a través de la pantalla, trucos y recetas. De allí su emoción cuando vio llegar a la cocinera y sommellier argentina en la final de MasterChef.

Gracias al negocio familiar, tienen un emprendimiento agrícola en Tala, descubrió un gusto por los productos autóctonos. De allí que frutas y verduras autóctonas estuvieran presentes en su cocina a lo largo de la competencia. Por eso decidió utilizar arazá para hacer la mousse del postre final, ese que ella sintió como el broche de oro para una competencia reñida.

Ahora que se convirtió en la nueva Masterchef, Natalia dice poder respirar más tranquila, mientras sus compañeros se acercan para sacarse fotos y el barullo invade el Estudio de Canal 10, ella habló con El País.

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En el centro de los anteojos de esta joven de 21 años, es una de las ganadoras más jóvenes de todas las ediciones de Masterchef, se pueden ver manchas negras de rímel, lo que evidencia algo que se pudo ver a lo largo de esta temporada, Natalia se emociona mucho, y dice ser una llorona.

Junto a Sebastián Piñeyro, Natalia protagonizó una de las finales más reñidas de estas cinco temporadas que Masterchef ha estado al aire. Ella asegura que fue recién cuando presentó el postre, que sintió que podía convertirse en la campeona, lo que terminó sucediendo cuando Sergio Puglia reveló su nombre pasadas las 23.00 del jueves.

Ahora ya se encuentra en el podio, sacándose fotos donde Nilson Viazzo, María Gracia Sosa y Alicia Patella lo hicieron antes, llevando una vez más el trofeo de MasterChef para el interior del país.

Y mientras sus antiguos compañeros se acercan para sacarse fotos, recibe una sorpresa. Su novio junto a una amiga llegaron con guitarra en mano para dedicarle una canción.

Mientras terminaban los acordes de "Consejo de amor" que se escucharon acompañados con palmas de sus compañeros y algún curioso, Natalia terminaba un gran día. Uno de esos que seguirá recordando por mucho tiempo.

Con intenciones de dedicarse a la cocina, aunque no sabe cuándo o a qué dedicarse todavía, quiere seguir estudiando, por eso el premio (entre el dinero, auto y curso de cocina) que más le atraía era estudiar en el Celler de Can Roca, en Girona, Natalia González ya tiene un grupo de seguidores, entre televidentes y amigos que esperan ver cuál será el siguiente paso que realice esta maestra de la cocina uruguaya.