Jorge Esmoris junto a Diego Bello y Pablo “Pinocho” Routin.

Nadie entiende nada, que sobre textos del gran Julio César Castro (Juceca) dirige Alberto "Coco" Rivero, empieza esta semana una gira por muchas ciudades del país, incluyendo dos funciones en el Teatro Solís, el sábado 16 y domingo 17 de abril. El material fue llevado a texto escénico por Chistian Ibarzábal, y será interpretado por Jorge Esmoris, ¨Pinocho" Routin y Diego Bello.

Ellos interpretan a tres hombres, que se deciden a despedir con su último vuelo a un amigo que ya no está. La obra sube a escena este viernes 4 de marzo en el Complejo Cultural Politeama, de Canelones, y luego recorre el país hasta el 23 de abril, cerrando la gira en Minas, donde dará su última función en el Teatro Lavalleja.

"La historia se puede resumir en el viaje que realizan tres personajes en un supuesto globo aerostático. Esos tres personajes son Julio, interpretado por "Pinocho" Routin, César, interpretado por Diego Bello, y Castro, interpretado por mí. Obviamente se trata de un espectáculo que perfectamente podría definirse como teatro absurdo, y salvando las distancias, tiene muchos punto en común con Esperando a Godot, de Beckett. Los tres personajes vuelan en un globo que solo existe en la imaginación, y ese vuelo es el pretexto para que aparezcan los textos de Juceca quizás menos conocidos. Porque lejos están de Don Verídico y El Resorte", indicó Esmoris a El País.

"Es difícil no identificarse con el humor de Juceca, porque tal vez sin proponérselo él nos habla de cosas esenciales y existenciales, y lo hace desde una lógica tan despiadada como absurda. Tomando como punto de partida, obviamente, que el absurdo no necesariamente es lo inconcebible o lo que se opone a la razón. Por el contrario, muchas veces o la gran mayoría de la veces, el absurdo suele ser hijo y esclavo de la razón", reflexionó el cómico.

"En un pasaje de la obra uno de los personajes se pregunta, ¿Cuánto pesa el silencio cuando el silencio se hace pesado? A priori uno puede suponer que esto es deliberadamente un disparate, pero pasado ese momento en que nos pareció un disparate, nos surge la misma pregunta, y como a tantas preguntas que nos hacemos, no encontramos la respuesta", agrega el destacado actor y humorista.

"Es difícil no identificarse con la lucidez, la sencillez y la ternura con las que Juceca aborda el tema de los recuerdos, el devenir del tiempo, las diferencias entre las pasiones y el amor", señala Esmoris.

"Creo que el teatralizar esos textos nos permitió descubrir un ángulo diferente a esos textos de Juceca. El humor es disparatado, absurdo, pero de una entrañable ternura, y también por qué no soledad".

Luego del estreno en el Politeama, el sábado 12 de marzo estará en Young, al día siguiente en Fray Bentos, el sábado 19 en Trinidad, y el domingo 20 en Salto. A lo largo de abril irá en Rocha, Maldonado, Dolores, Mercedes, Treinta y Tres y Minas.

Teatro