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Nicolás lauber

Creado en 2002 por la dupla del argentino Alejandro Orlando y el uruguayo Pedro Paiva, Los Modernos utiliza el lenguaje y la música para el humor. Son dos actores solos en el escenario que recitan y cantan, con un lenguaje que ya es propio de ellos. Para quien no los conoce, Orlando y Paiva están siempre parados frente a un atril, solos, sin escenografía y recitan sus textos. Esta forma de hacer humor primero triunfó en Córdoba, luego en Buenos Aires y después de un gran éxito en España donde fueron por tres meses y terminaron viviendo casi cuatro años en Barcelona, regresaron al sur para estrenar su nuevo espectáculo.

A fines del año pasado estrenaron en Villa Carlos Paz Humor a primera risa, el quinto espectáculo de Los Modernos que este lunes, a las 21.00 se presentará en Magnolio Sala. Las entradas están a la venta por Tickantel a 750 pesos.

“Estamos felices, vivimos con dignidad y si bien nos gustaría ser los Rolling Stones estámos cómodos siendo Los Modernos”, dice Paiva.

Mantenerse modernos no es sencillo con nuevas generaciones de espectadores y en tiempos de redes sociales, Paiva explica: “todo es breve por el mundo del zapping, y la gente en tres minutos ya se aburre. En teatro, para hablar de lo nuestro, implica un texto breve, siempre estar cambiando y también adaptarse al gusto del espectador. Tenés que hablar lo que puedas en tres minutos e invariablemente cambiar de tema, así la gente tiene que estar alerta porque le pegamos por diferentes lados”, dice.

Esa fue una modificación que en poco tiempo tuvieron que hacer Los Modernos para continuar captando al público. Es de las pocas cosas que tuvieron que cambiar ya que como su discurso es atemporal y “no entramos en la posibilidad de ser clasificados de machistas en todo este momento de reivindicaciones, por suerte no tuvimos que adaptar nada de lo nuestro. Por suerte, porque no estamos en ese segmento peligroso que a veces tiene la expresión cultural”.

Por su forma de hacer humor, Los modernos comparten universo con Les Luthiers y Monty Python, y si bien por geografía Paiva afirma estar más cercano a Les Luthiers, “si me das a elegir quiero parecerme a Monty Python toda la vida. Ya quisiera estar en la vereda de esos genios y de toda esa generación”.