Los antecedentes no tan lejanos del trabajo de Sergio Blanco en la Sala Zavala Muniz hacen que este nuevo estreno merezca especial atención, por más que se trate de un teatro leído.

En 2013 el dramaturgo y director teatral uruguayo radicado en Francia presentaba en ese espacio escénico Tebas Land, impresionando fuertemente a la crítica. Desde hoy se puede ver Ostia, que dará tres funciones, la de esta noche a las 21 horas y dos más el lunes que viene, a las 19 y a las 21 horas. Las entradas valen $300 y se venden en TickAntel.

En este caso el artista sube a escena con su hermana, la destacada actriz Roxana Blanco, para hablar justamente de un texto que trata de un hermano y una hermana.

Escrita en la ciudad italiana de Ostia y ensayada a distancia por Skype entre el dramaturgo desde París y la actriz residente en Montevideo, la primera presentación será aquí en Montevideo, ciudad natal de ambos, para comenzar luego un recorrido en prestigiosas galerías de arte de distintos países latinoamericanos y europeos.

El dramaturgo designa como instalación orgánica a este trabajo, del que afirma: "Es algo muy conmovedor para nosotros dos poder leer juntos este texto. Al comienzo de Ostia he puesto que las únicas dos personas que podrán leer el texto somos nosotros dos y que nadie más tendrá la autorización para hacerlo. Esto quiere decir que es un texto que el día que Roxana y yo desaparezcamos, también desaparecerá".

"Mi idea como escritor fue poder producir así un texto efímero y mortal. Por eso mismo para mí no se trata tanto de la lectura de una obra o del montaje de una pieza, sino que lo concibo más bien como una verdadera instalación orgánica."

La infancia, la enfermedad, la adolescencia, la muerte, la droga, la sexualidad, la creación y la separación son algunos de los temas que la obra transita, con referencias también a la historia italiana, al arte, a la política, abriendo el juego a un abanico de asuntos.

Desde hoy se verá el nuevo trabajo de Sergio Blanco