Con Victoria Césperes trae La sangre de los árboles.

Llegaron por seis funciones, únicamente. La exitosa obra La sangre de los árboles que ya se presentó dos veces en Montevideo y ayer estrenó su tercera reposición en Sala Verdi (con entradas a 400 pesos). Por este motivo se realizó una conferencia de prensa en la Embajada de Argentina donde estuvieron presentes las protagonistas, Juana Viale y Victoria Césperes, junto al dramaturgo y director teatral, Luis Barrales.

Esta obra también tuvo una gira por el Uruguay el año pasado, donde fue presentada en 14 ciudades del interior durante un mes. "Lo lindo de llegar al interior es el público y la dedicación y el amor con el que van a ver el teatro", afirma Viale, quien llegó, junto a Céspedes, tarde a la conferencia.

La sangre de los árboles construye una historia dentro de historias afirman las actrices cuando se les pide que la definan. La primera capa de la cebolla encuentra a dos mujeres que están esperando un resultado de ADN. "A partir de ahí se empiezan a dar todas las posibilidades que existen entre dos personas a distinto nivel", señala Viale. "Es una obra que es un viaje en el tiempo sin espacio. Es jugar con las relaciones".

"Es como un viaje ya que al saltar en el tiempo y espacio, se habla de lo universal de las emociones humanas", continúa la idea Césperes. Y más allá que el cuento es si son o no hermanas, "creo que la obra trasciende lo anecdótico de esa historia. Por eso nos llega", afirma la actriz uruguaya.

Crear una obra con estas características no fue sencillo, y así lo afirmó Barrales, quien entiende que fue fundamental para la creación de la obra, las colaboraciones de las actrices en escena y el vínculo que se formó entre ellas.

"El proceso en general en las compañías con las que trabajo tiene esa mecánica. A partir de la experiencia escénica se va construyendo el texto, y no al revés. Por la convicción de que la escena es mucho más sabia que el teclado y la acción solitaria de escribir", afirma Barrales. Así se van probando ideas, "hay mucho trabajo teórico", dice. De esta forma la historia final "es un ensayo sobre la construcción del parentesco. Algo que tenemos en común todas las personas", dice Barrales.

Por su parte, las actrices entienden que la amistad que existía entre ellas antes hacer esta obra fue decisivo para la obra. Fueron muchas horas de ensayo sin paga y por el amor de hacerlo, cuenta Viale, y agrega que los ensayos de la obra duraron nueve meses. Hacer la obra durante dos años, "incluye un entendimiento de parte nuestra, sino no las estaríamos haciendo", afirma por su parte Césperes.

La sangre de los árboles no termina con estas presentaciones en Montevideo, ya que en marzo las actrices se presentarán en el festival internacional dFeria de Donostia (España) con esta obra. Igual ellas aseguran que no están nerviosas por presentarse en este prestigioso festival. "El clic de presentarnos ante un público de festival se dio en Manizales (Colombia), donde nos presentamos el año pasado, y fuimos la obra destacada del festival" afirma Viale, quien sintió superadas las expectativas al presentarse, con varias dificultades técnicas en Colombia.

"Yo creo que no importa donde te presentes con esta obra", dice Viale. "Es muy humana. Por ahí es más fácil presentarte en un lugar donde no te conocen, que en un lugar donde sí te conocen. Porque siempre el juicio está con el nombre y no con el personaje que estás haciendo", señala la actriz argentina para quien su apellido "le pesa más al resto que a mí".

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