STAND UP

Es un divertido comediante que para estos tiempos donde no se puede viajar, se encarga de contar anécdotas y situaciones divertidas que surgen a la hora de hablar de viajar.

Desde el armado de la valija, pasando por salir del Aeropuerto de Carrasco para encontrarse en otros mundos como Guarulhos o Barajas, los controles de aduana y las excusas para justificar que se lleva yerba mate, son parte de las situaciones que cuenta este gracioso standapero.

Antes de su despedida del año, hoy a las 20.00 en Undermovie, Germán Bernárdez habló con El País.

 —Cómo surge hacer Pasajero?

—El año pasado, en la casa de Juan Pablo Olivera hice un taller con Fernando Sanjiao. Mate en mano y libreta en la mesa me dijo que como me paso viajando tendría que hablar de eso. Tenés que dedicarle tiempo con el tema de viajar. Con cuatro años me mudé a Málaga y en estos años he ido y venido varias veces. Dejé la idea anotada, como para que macerara y este año cuando se pudre todo, porque tenía ya cinco viajes confirmados al exterior y dos más en espera, y se terminó todo. Cuando acá todavía no pasaba nada, a fines de febrero se me empezaron a bajar los show en el exterior. Y entonces, cuando empezó la cuarentena me acordé del consejo de Sanjiao. Y me di cuenta que si este año no nos íbamos a poder ir de viaje, vamos a viajar arriba del escenario. Lo empecé a escribir, después me comuniqué con Ernesto Muniz para que me ayude, también me dieron una mano Germán Medina y El Pote, y salió y estoy enamorado del unipersonal.

—Ahora es la despedida del año.

—Sí. Tenía intenciones de llevarlo al interior en el verano, tal vez después del 6 de enero se pueda.

—Me decías que habías tenido ayuda, eso habla de una buena camaradería entre los standaperos.

—Sí, totalmente. Soy muy prolijo y honesto con lo que hago y creo que si uno hace las cosas bien, es mejor y se nota. Me parece que si uno se relaciona desde el respeto y el profesionalismo lográs vincularte desde ese lado. Este show tiene mucho que ver con Sanjiao y Germán Medina. Cuando lo estaba armando, pensaba presentarlo en algún boliche. El Movie era un sueño y fue Germán el que me dijo: tenés que presentárselo al Movie y él fue el que me recomendó. Ahora las directoras de la sala fueron las que me dijeron de volver a presentar el espectáculo.

—Pasajero se centra en lo que tiene que ver con viajar, desde el armado de la valija hasta el llegar al destino.

—Pasa que me fascina viajar. Hay gente que cambia el teléfono constantemente o se compra ropa, yo viajo. Entonces la mayoría de los chistes son a partir de cosas que me han pasado y que le son comunes a todos quienes han viajado. Son las inquietudes que surgen cada vez que uno viaja, son cosas que nos tocan a todos la misma fibra. Porque salir del Aeropuerto de carrasco a Barajas en Madrid, o Guarulhos en San Pablo, es otro mundo. Te subiste a un avioncito y cuando llegás estás en otro universo. También hablo de esas partes del viaje que son horribles, porque el cine se encargó de mostrar que viajar es un cuento de hadas, y hay partes que son incómodas y engorrosas.