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Primero fueron una tendencia en el mundo las novelas de autores como Henning Mankell, Jo Nesbo, Stieg Larsson y Camila Läckberg. Luego llegaron sus versiones cinematográficas (no siempre bien logradas) y ahora son las series nórdicas la tendencia en el mundo. Y los servicios de streaming cuentan con buenas producciones para adentrarse en este universo policial donde crímenes macabros se mezclan con policías traumatizados, escenarios de ensueño y críticas a la sociedad.

En las últimas semanas las series policiales suecas, noruegas o islandesas se han colado, por ejemplo, entre lo más visto en Netflix. No es de extrañar: que las novelas negras en escenario fríos siempre han encontrado interesados en este país.

La finlandes Sorjonen, por ejemplo estuvo toda la semana pasada en el Top10 de tendencias locales de Netflix. Y justo resume el protocolo de las series nórdicas.

Ya tiene tres temporadas en las que casos aislados son resueltos por el detective Sorjonen, quien se mudó de la ciudad a un pequeño pueblo esperando tener un poco de paz. Intentando mantener unida a su familia, Sorjonen irá resolviendo distintos casos, uno más traumatizante que el anterior, mientras intenta convivir con sus demonios interiores.

También de Finlandia y en Netflix es Karppi, que se centra en Sofía Karppi una detective de homicidios de Helsinski que acaba de perder a su esposo y cuida de sus dos hijos pequeños. El duelo duro poco ya que rápidamente vuelve a trabajar para resolver un asesinato. Una serie que también contiene todos los elementos de las series policiales nórdicas: misterio, personajes, escenario y un detective que intenta recomponerse del dolor.

Como si fuese un denominador común, en estas series no hay personajes peculiares o con una personalidad distinguible, como sucede en novelas de Agatha Christie; en las nordic noir lo que importa son los personajes centrales. Sus preocupaciones, vidas privadas, traumas, complejos y remordimientos, todo eso integra la personalidad de los responsables de detener al asesino.

La serie Wallander (disponible en NSNow de Nuevo Siglo) resume estas características. El asustadizo, desgarrado y acomplejado por su pasado detective Kurt Wallander (interpretado por el británico Kenneth Branagh) sumado a sus casos inolvidables, han sido los ingredientes del éxito de esta serie policial que se basa en las conocidas novelas del autor sueco Henning Mankell.

Los caminos gélidos, las rutas desiertas también tienen que ver con el éxito de estas producciones, ya que el ambiente lo es todo, y una de las razones por las que son tan adictivas. Una vez inmersos en el inquietante reino de asesinos en serie, detectives, perfiladores y muertes extravagantes no hay marcha atrás.

El paisaje de Escandinavia, frío, desolado, vasto y de apariencia tranquilo también funciona como una metáfora de los enigmas que esperan a los detectives a diario. La belleza de los campos y las costas se convierte en una escena de terror en un segundo. Un cuerpo puede aparecer en cualquier momento y convertir el escenario en una escena de terror.

Es a través de una red de pesca que aparece un torso donde empieza la islandesa Trapped (en Netflix). Una trama inquietante que aprovecha una tormenta de nieve para atrapar a los personajes junto al asesino en un remoto pueblito.

También de Islandia es Los asesinatos de Valhala que está en Netflix y fue una de las tendencias entres los uruguayos por varias semanas. La trama se centra en una serie de muertes que repiten un mismo y desagradable ritual. Y como en todas no faltan los cuerpos, la investigación del policía recién llegado, el halo de misterio y esa ambientación tan característica en todas las tramas de asesinato que protagonizan estas series.

Si bien a primera vista podría ser una característica negativa el tener una trama pausada, esta narración permite desarrollar y mostrar las imperfecciones y complejidades de los personajes. A esto hay que sumarle una gran fotografía y ambientes asfixiantes como parte del atractivo de estas series policiales.

También lo auténtico sobresale como una características. Un realismo que no escatima en escenas grotescas, algo así ya mostraba The Alienist, (también en Netflix) aunque en una trama histórica.

Y a esto habría que sumarle personajes femeninos importantes y una trama que permite hablar de crímenes y hacer una crítica al siempre presente estado de bienestar.