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Nicolás lauber

En la lista de los 50 grandes villanos del cine que se realizó por el centenario del American Film Institute (AFI), la enfermera Mildred Ratched de Atrapado sin salida quedó quinta. Lo interpretaba Louise Fletcher y le valió un Oscar. Y ahora tiene su propia serie de televisión.

Así, ahora al personaje de la peor enfermera del mundo se le suma la visión del productor Ryan Murphy, quien muestra, como es su costumbre, una versión alterna de la historia. La hace más feminista y mucho más tolerante hacia las personas de color y los homosexuales. Ya lo hizo en Hollywood (está en Netflix) y Feud.

Ahora con Ratched -desde ayer en Netflix-, muestra qué hizo que la enfermera de un tranquilo manicomio en California se convierta en la villana que todos conocemos.

Como en otras ficciones de Murphy hay un precioso vestuario y una cantidad de actrices conocidas sobre quienes recae el peso de la historia. Además, hay caras recurrentes en la filmografía de Murphy como Judy Davis, Finn Wittrock o Jon Jon Briones, a quienes ahora se suman Sharon Stone, Cynthia Nixon, Amanda Plummer y Rosanna Arquette.

Pero el atractivo de la serie, además de una genial atención a los detalles de época y a los filosos diálogos, está en Sarah Paulson, otra de las actrices recurrentes en el universo de Murphy quien sabe desdoblarse para aparentar ser una mujer tranquila que oculta algo, y hacer que los espectadores no lo sepamos hasta que la trama esté avanzada. Ella es, claro, la enfermera Ratched.

En el manicomio ubicado en el tranquilo pueblo de Lucía, habitan varios personajes extraños y misteriosos, y está listo para recibir a Edmund Tolleson, quien es conocido como el “matacuras”, y cuyos crímenes son presentados al inicio de esta temporada. Gracias a los logros y resultados comprobados de ese centro mental, la esposa del gobernador entiende que es el lugar ideal para mostrar los logros de su marido, quien espera ser reelecto. Una vez que el andamiaje comience a andar, ya nada será igual para los pacientes, ni para Ratched.

Las series sobre villanos del cine se ganaron un lugar. Ya se mostraron los orígenes del asesino de El silencio de los inocentes, Hannibal Lecter en Hannibal; también la historia de Norman Bates el protagonista del clásico de Alfred Hitchcock, Psicosis, en Motel Bates, por nombrar dos conocidos villanos del cine.

Algo hay en estos personajes que atrae al espectador como si fuese un insecto a la luz. Parte de ese atractivo radica en conocer los motivos que los llevaron a cometer sus famosas fechorías.

La serie Ratched, que tendrá una segunda temporada, funciona para conocer más sobre este rico, detestable y conocido personaje.