La vedette rompió el silencio luego del vuelo del escándalo y quiere tener un encuentro con Francisco para saldar sus cuentas espirituales.

La vedette argentina Vicky Xipolitakis (de 28 años) atraviesa una seria crisis luego de protagonizar el mayor de sus escándalos: el video en que se la ve piloteando un avión con el consentimientos de sus dos pilotos. 

A varios días del paso del huracán, la vedette decidió romper el silencio. Primero se manifestó en su cuenta de Twitter, en la que atinó a escribir un escueto “Perdón”. Luego, brindó una entrevista a la revista Caras en la que dio más detalles de su estado anímico actual: “Nunca imaginé causar tanto daño. Asumo que todo lo que sucedió es culpa mía. Estoy muy arrepentida. Pero yo no tengo maldad. No me gusta lastimar a nadie. Ni fue mi intención hacerlo. Simplemente me fui a Rosario como lo vengo haciendo desde hace un tiempo a visitar a un amigo”, dijo. 

En su descargo, la falsa griega le echa toda la culpa a los pilotos. “Ellos se me acercaron, se sacaron fotos conmigo y me invitaron a viajar con ellos en la cabina. Charlamos y me dijeron que despegara el avión. En ese momento me dio un poquito de miedo. Me pareció peligroso porque yo sé que los momentos críticos de un vuelo son el despegue y el aterrizaje; el resto va con piloto automático”, expresó. 

Finalmente, Xipolitakis expresó su deseo de tener un encuentro con el  Papa Francisco, de gira por América Latina, para saldar sus cuentas espirituales. “Hoy vivo presa, destruida y arrepentida si es que hice mal a alguien. Quiero ver al Papa, que está cerca, para que me perdone si es que hice tanto mal y para que limpie todos mis pecados”, cerró.

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