POLÉMICA

en base a la nación/gda

En la última emisión del Cantando 2020, Tyago Griffo y Flor Torrente tuvieron la posibilidad de compartir un breve diálogo durante unos instantes. Mientras se hacía la lectura del voto secreto, y luego de haber protagonizado un ida y vuelta hace unos días, Ángel de Brito y Laurita Fernández aprovecharon para consultarles si entre ambos las cosas habían quedado en buenos términos luego de lo sucedido.

Para entender la historia hay que apelar a la cronología. En la gala anterior, en ocasión de su paso por la pista, a Griffo (hijo de Gladys, la bomba tucumana) le preguntaron si, como aseguraban algunos medios, estaba enganchado con la hija de Araceli González. Griffo no descartó que pospandemia la invitaría a salir, pero dijo que ella estaba en otra liga: “Ella es un chica divina, es como una muñequita de cristal y yo vengo más del barro”.

Cuando le consultaron qué opinaba sobre esa declaración, Torrente dijo: “Con todo el amor del mundo, estamos en el 2020, ‘muñequita de cristal’ no va”. A partir de eso, se dio un acalorado debate en las redes, en el que muchos que interpretaron las palabras de la actriz como una agresión, aunque rápidamente ella aclarara que esa no fue su intención.

Echando más leña al fuego, Moria Casán se refirió al tema al dar su devolución: “¿Lo sentiste como una ofensa y no como un cortejo? ¿Por qué atrasa? No me digas que sos tan frívola como para ser una esnob”.

Ante la confrontación, Torrente trató de explicarle su punto de vista, pero Casán decidió cerrar el asunto: “Defendamos un poco a los varones. Me pareció raro que en lugar de agradecerle dijeras eso. Pero bueno, no te gustó, ya está”.

Así el viernes, y ante la mirada de Torrente, Griffo dijo: “Por si a alguien no le quedó claro, lo que dije fue un comentario sin mala intención. No entiendo qué se puede llegar a malinterpretar, obviamente la respeto, ni siquiera fue un piropo”. De Brito le consultó cómo habían quedado las cosas y el joven dijo que estaban bien, que habían hablado “mediante móvil”.

A su turno Torrente agregó: “Yo no tengo demasiado para decir, yo ya expliqué que no me pareció un halago, se hizo un tema mucho más grande de lo que era. Yo no tengo ningún conflicto con él, simplemente yo no siento que eso haya sido un halago”, dijo.

Si bien dijeron que la situación no era grave, ambos estaban incómodos en la pista y el diálogo fue frío. El punto final a ese intercambio lo puso Gladys “la bomba tucumana”, que concluyó: “Por favor, que alguien me diga que soy una muñequita de cristal, me muero de amor”.