COLUMNA FARANDULERA

Hay gente, como una que vive en una cajita de zapatos en Montevideo y hace la cuarentena como puede. Después está el Pocho Lavezzi que la está pasando muy mal en Saint Barth. Sí, el exfutbolista decidió pasar la cuarentena por el coronavirus en el caribe. Ojalá me agarrara así una pandemia mundial, aunque con mi suerte seguro que eso nunca va a pasar.

Claramente no solo está como quiere, también dónde quiere estar, le dije a mi amiga Irene.

No solo eso, está con quien quiere, me respondió ella para contarme que encima de todo tiene nueva conquista amorosa.

Ah, lo feliz que ha de estar la Yanina Screpante que no solo se quedó sin el Pocho, también ha de estar encerada en Buenos Aires como cualquier otro mortal en este momento.

Bueno, Irene, quiero detalles, nombre y colegio como decía Silvio Soldán.

La chica se llama Natalia Borges, aunque dudo que tenga relación con Jorge Luis, me dijo, porque es basileña. Y a sus 33 añitos ya está divorciada de un empresario de Nueva York y también anduvo saliendo con otro empresario de Italia que encima era amigo del Pocho.

Irene, con algunos datos de la chica ya bastaba, no sabía que la ibas a terminar acosando, le dije.

Si se trata del Pocho, estoy al tanto de todo, me dijo Irene que todavía no perdió la ilusión de encontrárselo y que se enamore de ella.

Es más fácil encontrar la cura contra la pandemia a que el Pocho te de bola, le dije. Igual ella no pierde la ilusión.