El astro mexicano dejó atrás los rumores sobre su salud y se dejó ver notablemente distinto que en sus últimas apariciones
Como tantos otros lo han hecho antes, Luis Miguel ha decidido convertirse en un ídolo inalcanzable, sumido en un ostracismo que sólo abandona para salir de gira. Será por eso que su vida cotidiana permanece siempre rodeada de un halo de misterio, de preguntas y especulaciones.
En medio de rumores sobre su salud y sobre una supuesta depresión, el Sol mexicano decidió hacer una breve reaparición pública. Fue para visitar la Casa Bijan, una de las tiendas de ropa y perfumes masculinos más caras del mundo, ubicada en Beverly Hills. Nicolas Bijan, heredero del diseñador iraní, compartió una foto de su encuentro con el cantante, que luce sonriente, mucho más delgado, menos bronceado y algo "rejuvenecido", si se lo compara con las imágenes que dejó durante su última gira, en 2015.L
¿qué se hizo?La Nación/GDA