La modelo y empresaria fue convocada para oficiar de maestra de ceremonias en una cumbre para tratar la temática del cambio climático y la esclavitud moderna en el Vaticano. A su regreso, habló con Revista ¡Hola! acerca del encuentro que cambió su vida.

El 21 de julio es una fecha que quedará guardada a fuego en la memoria de Valeria Mazza por haber sido el día en que se cruzó cara a cara con el Papa Francisco. 

La modelo viajó al Vaticano para ejercer el rol de maestra de ceremonias en la cumbre Modern Slavery & Climate Change, the Commitment of the Cities convocada por el Sumo Pontífice.

Se sorprendió ante la invitación del Monseñor Guillermo Karcher –encargado de ceremonial del Vaticano y un posterior correo electrónico de monseñor Marcelo Sánchez Sorondo que lo concretaba.

"Me encantó, sentí que podía sumar un granito de arena. Siento que en un sólo día con Francisco aprendí y crecí mil años", declaró en diálogo con Revista ¡Hola!

Hubo nervios al comienzo, pero logró distenderse. "Terminé exhausta pero muy feliz. Fueron diez horas, con apenas un receso para almorzar, pero nunca salí del salón porque no me quería perder de nada", contó.

Consultada acerca del momento en que estuvo mano a mano con el Papa Francisco, Valeria Mazza dijo "es muy cálido, me preguntó por Alejandro y por los chicos. Antes de bajar del estrado para sacarnos la foto grupal, me animé a pedirle que me firmara su última encíclica, Laudato Si, que habla de estos temas, para llevarla a casa. Y antes de irse saludó a Alejandro, que estaba al fondo", relató. 

encuentro