COLUMNA FARANDULERA

fabiola bouvier

El famoso exilio dorado del que hablaba Jorge Rial el año pasado se terminó. Ya no vienen los famosos en oleadas para quedarse. Salvo Susana (¡volvé a la tele que te extraño!), los demás se fueron retirando paulatinamente.

Claro, porque ahora se fueron todos para Miami, me dijo mi amiga Irene. Ese es el nuevo destino de moda, ya que vas, paseas, tomás sol y volvés con la vacuna contra el covid.

Bueno, mientras se vacunen, poco importa dónde lo hagan, le dije.

Sí, mientras no te pase lo que a Ángel de Brito que fue, se vacunó e igual se agarró coronavirus.

Pobre. Igual me enteré que otro que llegó y ya tiene su dosis es Marcelo Polino, le dije a Irene.

Sí, pero la que está calentando la garganta para comenzar su catarata de críticas es Yanina Latorre, porque parece que su enemigo, Jorge Rial, también se fue para las tierras que supo reinar Ricardo Fort.

¿Y por qué las críticas hacia Rial?, pregunté.

Porque fue Jorge el que salió con munición pesada cuando Latorre se fue con su madre a Miami para que se vacune.

Con razón no volví a escuchar a Rial hablar del tan comentado exilio dorado, ya que esta vez es él quien aprovecha para sacar ventaja de la situación.

Ya veremos cuando regrese al sur qué dice de esto, porque ha sido implacable con los otros famosos que fueron a hacer lo mismo que él hizo.

Mirá, con los famosos argentinos, y sobre todo los chimenteros, siempre se aplica la frase: has lo que digo y no lo que hago. Claramente Rial no iba a ser la excepción.