ENTREVISTA

Basta con escuchar los primeros segundos de Una noche de rock en Medallo, el nuevo disco de Trotsky Vengarán, para notar que el resultado es muy diferente a Pogo, No estamos solos y Juegues donde juegues, los otros tres discos en vivo de la banda. “Olé, olé, olé, TroTsqui, TroTsqui”, corea el público, con un notorio acento colombiano que exagera la “t”, al comienzo del álbum. “Son muy amables, amigos. Es un honor para Trotsky Vengarán estar esta noche con ustedes, en Medellín”, dice Guillermo Peluffo antes de lanzarse sobre “Déjate llevar”, la canción del disco Todo para ser feliz que se carga de la energía de los asistentes, que corean el estribillo a todo volumen.

El show que los uruguayos brindaron en agosto del año pasado en el club Cuchitril Bombay —junto a los colombianos Calibre 38 y los mexicanos Seguimos perdiendo—  fue planeado como un material de archivo para el grupo, pero la respuesta del público fue tan intensa que decidieron publicarlo hoy en plataformas digitales. “Nos mostrarnos de una manera nueva y sirve para darle un cariño a la gente de Medellín, porque es particular cómo quiere a la banda”, le explica Peluffo a El País.

“Era raro imaginarse que íbamos a tener una base de fans tan enfervorizados en Colombia”, agrega el guitarrista Hugo Díaz. Eso se comprueba en los dos videos publicados como adelanto del disco: “El alma en dos” y “192 Manga”. Hay mucho pogo, abrazos entre amigos, gente revoleando sus camisetas, sudor, celulares en alto y, especialmente, el canto colectivo. Sobre el escenario, la banda disfruta del momento, mientras que detrás de la batería de Guillermo “Cuico” Perazzo se ve la caricatura del diablo sonriente que resume la imagen del grupo desde hace años.

“Somos una banda que encuentra su sentido cuando está arriba de un escenario”, asegura Díaz. “Hemos internalizado que todo lo que hacemos lo vamos a tocar en vivo”, agrega Peluffo. Tal vez sea por eso que sus canciones terminar de cobrar sentido cuando suenan en el escenario y se contagian de la energía de un público que corea las letras. Al respecto, el cantante comenta: “Es así. Las canciones tienen otra dimensión en el show y eso lleva a muchas malinterpretaciones y lecturas simplistas. A veces nos atacan por ser primitivos o naif; incluso nos insultan diciéndonos ‘adolescentes’. Y sí, hay una cosa adolescente dentro de todos nosotros: el amor eterno, los sueños utópicos, la necesidad de estar con amigos”.

El cantante pone como ejemplo a “Hasta mañana”, del disco Los valientes. “Es una letra simple, casi cotidiana y casi banal. Pero cuando está insertada dentro del recital y hacés el final a capella mientras los tipos están todos sudados, se termina generando algo hipnótico”, asegura. “La gente que no va a los shows nunca lo va a entender”.

Y Una noche de Rock en Medallo es una excelente puerta de entrada para aquellos que jamás vieron en vivo a Trotsky Vengarán. En el caso de los seguidores del grupo formado en 1991, este registro en Colombia es la confirmación de la euforia que, desde hace casi 30 años, generan durante sus actuaciones. Incluso al final de “El alma en dos”, Díaz saluda a uno de los asistentes que lloraba de la emoción al escuchar la canción grabada en el discazo Durmiendo afuera (2000). “Me encanta ver hombres sin camisa llorando con esta canción”, dice al final de la grabación. “El tipo, todo musculoso y tatuado, estaba con el pecho al aire mientras se le caían las lágrimas. Es increíble cuando pasa”, le dice a El País.

La idea original de su cuarto disco en vivo era publicarlo como un adelanto del show que iban a ofrecer este sábado en el Antel Arena (“El show más grande que vamos a hacer en nuestra carrera hasta el día de hoy”, le había dicho Peluffo a El País cuando se anunció la fecha). Sin embargo, la suspensión de espectáculos públicos a causa del coronavirus obligó a postergar la fecha para el 13 de marzo de 2021.

Pero, en las condiciones actuales, el sentido del álbum se terminó resignificando y ahora funciona como una especie de consuelo para aquellos que se quedaron con ganas de celebrar la trayectoria de Trotsky Vengarán en el recinto cerrado más grande de Uruguay. “Esta es una manera de seguir en contacto con la gente”, dice Peluffo, quien también adelanta que planean publicar todos los videos del show. “Esta es una buena manera de mantener a la banda y de dejar en claro que esto no nos va a tirar abajo”, complementa Díaz.

Sobre el álbum editado por Bizarro, el cantante de Trotsky Vengarán le dice a sus seguidores: “Nuestro deseo es que lo disfruten, cada uno a su manera”. Por último, el guitarrista aconseja: “Escuchen el disco a todo volumen, y si lo ven en la tele que sea parados, así pueden agitar”.