Después de una madrugada de vigilia por los fallos, se puede anunciar que formalmente terminó el carnaval más largo del mundo en su edición 2015, aunque en la noche de hoy se realiza la segunda etapa de entrega de premios y mañana todos los primeros premios actuarán por última vez en el Teatro de Verano.

La última etapa del Campeonato Nacional de Aguas Abiertas organizado por la Federación Uruguaya de Natación tendrá lugar hoy en Piriápolis. La competencia tendrá circuitos de 2500 y 5000 metros en La Rinconada Sport y la Bahía de Piriápolis desde las 10hs.

Los ganadores de los primeros premios fueron revista Tabú, humoristas Sociedad Anónima, comparsa C1080, parodistas Zíngaros y murga Patos Cabreros. Los cinco primeros premios son merecidos y fueron festejados por propios y ajenos.

Algunas discrepancias pueden surgir en una primera mirada a los números que se conocieron en las últimas horas, y particularmente sigue sorprendiendo que en un concurso donde los puntajes por conjunto superan los 3.000 puntos, las categorías se sigan definiendo por mucho menos de 100 en todos los casos. Eso implica que, calculando los puntos por jurado y por rueda, excepcionalmente las diferencias por jurado en cada rueda llegan a alcanzar un punto entre los primeros y los segundos premios. Resulta extraño que, teniendo tanto marco de puntaje y tres ruedas de competencia para definir posiciones, sea tan escasa la diferencia.

Esta salvedad es muy importante hacerla ya que esa discreción a la hora de definir no hace más que desvalorizar la obtención de primeros, que en este caso son inobjetables, y en varios de los casos merecerían una valoración muy superior respecto de sus rivales.

Este Carnaval también dejó mucho hilo para cortar en lo que respecta a su entorno inmediato.

Si bien año a año el Carnaval viene ganando un mercado de público que le era ajeno y que lo obliga a buscar la profesionalización de sus rubros y universalizar un género que hasta hace algunos años era para un marco de espectadores acotados, artísticamente le ha costado adaptarse al crecimiento.

Aún no se ha tomado conciencia de la repercusión que ahora tienen sus repertorios, y es por eso que se lanzan conceptos agresivos y muchas veces discriminatorios, en el sentido de la estigmatización, que suelen ser ofensivos para el público en general. Hay sectores de la sociedad que son constantemente ofendidos por la estigmatización y la promoción de estereotipos erróneos o perimidos.

A veces habría que ponerse a pensar lo difícil que puede resultar sentarse a apreciar algunos espectáculos para personas que son obesas, por ejemplo, y ver como se los agrede constantemente desde el escenario. Y eso se da incluso en conjuntos que luego espetan en sus repertorios frases armadas en torno al respeto a la diferencia o la convivencia en diversidad.

Sería necesario empezar a dar señales en este sentido y no premiar repertorios que puedan resultar misóginos, homofóbicos o discriminen en cualquiera de las formas, sobreentendiendo que el mero hecho de participar en Carnaval habilita ese tipo de "libertades" humorísticas o poéticas.

En lo meramente comercial, el Carnaval tiene cada vez más patrocinio y menos escenarios comerciales, lo cual redunda en más ganancia para los empresarios en todas las áreas pero menos ingresos para la mayor parte de los componentes de los conjuntos.

Cuatro escenarios comerciales, unos quince escenarios populares que abren tres o cuatro días a la semana, un escenario móvil de la Intendencia de Montevideo y cuatro móviles que funcionan en convenio entre la gremial carnavalera Daecpu y la empresa Cutcsa, sustentan los jornales que los integrantes de los 42 conjuntos de Carnaval reciben por su trabajo en los espectáculos.

El carnaval tal cual es concebido en la actualidad requiere que los espectáculos se ensayen durante más de tres meses, en los que la mayoría de los componentes no reciben honorarios, lo cual determina que los ingresos de la mayor parte de las personas que hacen al carnaval salgan netamente de lo que los conjuntos generan en esos 45 días de tablados. Muchas agrupaciones llegan a realizar un promedio de 80 escenarios por temporada, pero el mayor porcentaje apenas alcanza las 30 actuaciones pagas.

1 - La catalina ausente

Fue el hecho más comentado en la previa, la eliminación de la murga en la prueba de Admisión para el Carnaval 2015. Hoy queda planteada otra interrogante: ¿volverá Agarrate Catalina para el 2016?

Supuestas amenazas de censura televisiva y el desalojo de su local de ensayo fueron titulares. La murga no quitó una coma de su repertorio, fue televisada y terminó en cuarto lugar en el concurso.

Cayó la Cabra volvió a ser noticia cuando uno de sus componentes sufrió una descarga eléctrica en Malvín, que lo dejó internado durante varias horas y en reposo por varios días. El escenario siguió funcionando.

Aristóphanes hizo pública una denuncia en la que acusaba al director de Zíngaros, Ariel Sosa, de exigir que no se los contrate juntos en los escenarios. La denuncia fue pública y no se formalizó en ningún organismo.

Algunas cuestiones y reclamos sobre los 45 días de la fiesta de Momo