La Tabaré siempre se las ingenió para ir contra la corriente, en pequeños y grandes detalles. Se erigió como referente de una especie de contracultura del rock nacional y por eso le importa poco cumplir 30 años. En realidad le importa mucho, pero no porque le signifique una crisis existencial.

La Tabaré ha vivido en constante crisis y eso la ha alimentado a seguir adelante, cambiando de forma y también de nombre. Entonces estos 30 años de supervivencia merecen ser festejados a lo grande.

La celebración se ha extendido durante todo 2015 e incluyó un repaso discográfico con una cantidad de fechas en Bluzz Live y shows en Argentina. El plato fuerte será un recital en el Teatro de Verano el 14 de noviembre, para el que las entradas ya están a la venta.

Las primeras 1000 personas que compren su entrada de manera anticipada a 360 pesos en Red UTS para ese espectáculo accederán a otro evento que se enmarca en estos festejos: la proyección del documental Ni estrellas ni fugaces, que empieza hoy en la Sala Zitarrosa.

Porque la historia de la banda de Tabaré Rivero es bastante de película. Siempre lo ha tenido a él como protagonista pero el elenco ha ido variando, así como la banda sonora y la coyuntura. Todo eso mereció que el exguitarrista de La Tabaré, Hernán Rodríguez, realizara este largometraje.

Elaborado a partir de entrevistas y de material de archivo (del propio Tabaré Rivero, por supuesto), el documental reconstruye las peripecias de la banda, un mito andante de raíz rockera y coqueteo constante con el teatro y otras artes.

Todo eso, además, con la particular visión que le puede imprimir una persona que vivió desde adentro por más de una década el funcionamiento de este proyecto artístico difícil de definir. Hernán Rodríguez abordó el material sin preocuparse por ser objetivo y dejó que su propia experiencia como músico nutriera el proceso y también el producto final.

Del documental (que fue editado en formato DVD por el sello Bizarro) participan personas que de una manera u otra hicieron parte de La Tabaré, ayudando a reconstruir cronológicamente una historia que comenzó en 1985 en un país que retornaba a la democracia, a partir de la reunión de Rivero, Riki Musso y Alvín Pintos.

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La primera función de Ni estrellas ni fugaces, segunda película de la banda (la primera es La Tabaré, rocanrol y después) será hoy a las 21.00 en la Sala Zitarrosa, y habrá dos más: el 28 de septiembre y el 5 de octubre, en el mismo horario. Para ir a alguna de las funciones es necesario presentar la entrada para el show del Teatro de Verano en boleterías de la Sala todos los días entre las 16.00 y las 21.00, y retirar la invitación.

Tres funciones de Ni estrellas ni fugaces servirán para entender cómo La Tabaré sobrevivió durante 30 años a pesar de todas las circunstancias, y también para comprender qué motivos llevan a Rivero y sus actuales compañeros a extender durante todo un año la celebración de un cumpleaños significativo. La fiesta final será en el Teatro de Verano; esto, sólo un buen aperitivo.

“Ni estrellas ni fugaces” se verá hoy en la Sala ZitarrosaBELÉN FOURMENT