Lanzamiento
La cantante de tangos acaba de editar Quinto, su quinto álbum
Grabado en vivo en Tractatus, el quinto disco de Maia Castro acierta en registrar lo que pasa cuando la cantante está en el escenario.
Castro tiene una frescura y una calidez cuando está ante la gente, que no siempre ha sido captada en sus materiales de estudio, y su decisión de cara a Quinto le hace justicia a las canciones nuevas, sobre todo a “Camino” y a “Calendario amarillo”, que son dos piedras preciosas entre el repertorio que firma. Castro es una compositora interesante, de una poesía melancólica y sin demasiada metáfora, que va directo al pecho y golpea fuerte; y que se respalda en las estructuras del folclore, sobre todo de la zamba.
Además de los inéditos (“Mundo de a dos”, “Cinco de agosto” y “Sólo tus ojos” son las otras), Castro incluye versiones de “Qué pena” de Zitarrosa, “Soledad” de Gardel, y una bellísima de “Zamba de mi tristeza”, que cantaba Amalia de la Vega. Es un trabajo redondo, en el que destacan los arreglos a cargo de Horacio Di Yorio.