Presentación

El músico edita Terrorista emocional y lo presenta el 15 en la Sala Balzo

El año pasado, Federico Deutsch volvió a tocar con los Maverick para revisitar el disco Mi amor yo voy al bar solo a verte, y su nombre volvió a hacer ruido en un circuito local del que en realidad nunca se fue, porque siempre estuvo activo, sea con actuaciones en solitario o con música para obras de teatro y películas.

Pero ahora, con algunos de los Maverick —sobre todo los músicos José Nozar y Marcelo Fernández— y otros colaboradores, completó un disco propio que presentará en días. Se llama Terrorista emocional, lo tocará el viernes 15 a las 21.00 en la Sala Hugo Balzo del Auditorio del Sodre (las entradas están en venta en Tickantel y boleterías), y está muy bien.

“Este disco se conecta con Maverick por las personas, porque hay mucha gente en común en estos proyectos, y musicalmente por suerte es bien diferente. Capaz lo de Maverick es un proyecto más de grupo, y esto es más personal. Y me parece interesante hacer cosas diferentes con la misma gente”, dice Deutsch a El País, y destaca que el álbum tiene “eso relindo de compartir con amigos, que pasamos bien cuando tocamos, y eso se transmite. La gente lo recibe”.

Esa calidez de la que Deutsch habla está presente en la sonoridad general de un álbum que es climático aunque para nada oscuro, envolvente y rítmico, de electrónica en líneas generales aunque sin ser frío. Para lograr eso partió de composiciones propias, pero estuvo muy abierto al aporte de sus amigos, colaboradores y del productor Nandy Cabrera, en quien tuvo un compañero de camino.

—A este grupo de amigos, ¿los une más esa cosa de improvisación, de la búsqueda que se da a la hora de tocar, o la investigación musical, un gusto más de nerds?

—(Piensa) Creo que cuando arrancás un tema hay una etapa de investigación, de irlo buscando. Eso pasa siempre en todos los grupos; un rato de probar, armar, ir y venir. Y después está la parte de estar tocando con amigos. Capaz que yo antes era más de tocar los temas como eran, y ahora me gusta que sucedan cosas más espontáneas, en Maverick y en este proyecto, que dije: los temas salieron de una forma, el disco es de otra, y lo que va a suceder de ahora en adelante va a ser de otra.

—Hay mucho de abstracto en Terrorista emocional, ¿pero qué sacás en concreto hoy, después de todo el proceso de trabajo que hiciste?

—En este momento me encanta. Después viene un tiempo en que uno se aburre de los discos, y después lo volvés a escuchar. Pero estoy supercontento, quedó mucho mejor de lo que imaginaba, y eso también es por trabajar con gente. Por todos los que participaron, el disco creció para todos lados. En ese sentido, fue buenísima la apertura.