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Los diez discos uruguayos más importantes de la última década: un ranking del 10 al 1

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Los discos uruguayos de la década 2010-2009

LISTA

De No Te Va Gustar a Eté & Los Problems, esta selección incluye a Alfonsina, Fernando Cabrera, Los Buenos Modales, Jorge Drexler y más

El cierre del año implica, esta vez, también el cierre de una década, que fue de cambios y de destaques para la música uruguaya. Hubo logros importantes en cuanto al reconocimiento del exterior, y hubo un estancamiento en la escena rockera que habilitó el crecimiento de nuevas figuras. Apareció el rap a pelear un rol protagónico, avanzaron las mujeres, y así se transformó el panorama. Por eso, hicimos esta selección (que intenta ser objetiva, pero seguro no va a satisfacer a todos) de los 10 discos uruguayos más importantes de los últimos 10 años. Y estos son.

10

“Por lo menos hoy” (2010)

Es un disco definitorio para el curso de No Te Va Gustar, porque le dio sus primeras nominaciones al Grammy Latino y con eso, el último impulso necesario para la proyección continental. De ahí en más, la banda dejó de ser rioplatense para ser latinoamericana o ya directamente internacional, y se abrió paso fuera de fronteras con “Chau”, “Cero a la izquierda” y “Arde” como bandera, reinstalando el rock nacional en la región. Produjo Juanchi Baleirón de Los Pericos e incluye un tema contra la violencia de género (“Nunca más a mi lado”), y el último gran reggae de una banda de muy buenos reggaes: “Volar”.

9

“Rêverie” (2011)

Con este disco, Luciano Supervielle demostró por qué es uno de los mejores músicos de la escena uruguaya. En esta autobiografía sonora dialogan sus influencias y por eso conviven tan bien las composiciones al estilo Bajofondo (“Real y mágico”, “Forma” y “Un poco a lo Felisberto”), el sampleo (que trae a “Canción de muchacho” y a “Gritar” al presente), la huella de Charly García (con la relectura en francés de “No soy un extraño”) y la sutileza de Claude Debussy (en “Carroussel” y “El Príncipe”). Grabado en su mayor parte en vivo y luego intervenido en el estudio, Rêverie se ganó un lugar entre lo más original que nos dejó la década.

8

“Grandes valores del hardcore” (2013) y “Los Buenos Modales” (2016)

Latejapride* era prácticamente la única banda de rap con espacio ganado en la escena local, hasta que en 2013 apareció el primer disco de AFC, unos raperos mega-habilidosos con vibra rockera que llegaron de San José para sacudirle la modorra a Montevideo, a fuerza de rimas veloces e ingeniosas. Después, el panorama hiphopero se abrió y en 2016 nació Los Buenos Modales, una cumbre de productores y MCs que unieron fuerzas para cristalizar una tendencia sonora más actual. Los Modales aportaron el gran hit del rap uruguayo de este milenio: “Flanders”.

7

“Diciembra” (2011)

Consideramos, para esta lista, incluir los discos debut de Julen y la Gente Sola o Alucinaciones en Familia. Pero no hubieran existido si antes no hubiese estado la obra cumbre de 3Pecados, que le marcó el camino a la movida indie que se expandiría y puliría en años siguientes. De los primeros acordes de “Encandila” hasta el último eco de la coda psicodélica de “Inútil en español”, Diciembra es un removedor paseo por la desesperanza de aquella Montevideo, la oscuridad, Eduardo Mateo y el noise. Y la prueba de que discos de esa calidad de producción, composición e interpretación podían hacerse con lo mínimo.

6

“Pactos” (2017)

En este disco, Alfonsina se alejó del sonido gypsy-jazz que había definido su debut y grabó una serie de canciones que funcionan como un faro para las mujeres músicas. Encargándose de la mayoría de los instrumentos y de la producción (en este caso compartida con Fabrizio Rossi), Pactos fue ideado como un manifiesto personal que alcanza sus puntos más altos en “Ese frío vacío” (“No soy lo que quieren hacer conmigo”, insiste) y “Juego con fuego”. Gracias a su abordaje rockero y a sus letras llenas de imágenes poéticas, el disco le abrió las puertas a varios escenarios de Latinoamérica y Europa. Por si fuera poco, Pactos incluye “Casas unidas”, una de esas canciones destinadas a pasar a la historia gracias a su estribillo, que puede repetirse como si fuese un mantra.

5

“Cabrera canta Mateo y Darnauchans” (2015)

Grabado en vivo, este disco resume la calidad interpretativa y revisionista de Fernando Cabrera. Si bien Viva la Patria y 432 podrían formar parte de la lista —¡qué gran década la de Cabrera!—, Cabrera canta Mateo y Darnauchans es la quintaesencia de su sello musical. Acompañado de Edú Lombardo, el músico reinventa el repertorio de Eduardo Mateo y Eduardo Darnauchans y generar un ambiente minimalista —escuela de João Gilberto— donde reinan los recursos expresivos del silencio. Por encima de todo, Cabrera pellizca dulces acordes en su guitarra eléctrica y logra que su voz angustiosa brille más que nunca.

4

“Se pule la colmena” (2011)

Podría ser #8, que es a nivel global un mejor disco que el elegido, pero Se pule la colmena se ganó el lugar por varias cosas. Es la reactivación discográfica de Buenos Muchachos tras unos años de idas, vueltas y crisis; llegó casi que en paralelo a su debut en solitario en el Teatro de Verano; y tiene muchos de los hoy clásicos de la banda. Abre con “Beefheart” y luego aparecen “Oomm”, “Solo pienso”, “Nico Cuevas”, “Sin más”, “Sonido metal”, “Mi rincón”, “It’s Ok” y “Sangre de Arachania”, todas fijas del repertorio en vivo. Con Se pule…, los Buenos Muchachos se refundaron, y en esta década se consolidaron como una de las grandes bandas uruguayas de la actualidad.

3

“Habla tu espejo” (2014)

Este disco marcó un precedente en la discografía de El Cuarteto de Nos. Para cerrar la exitosa trilogía de Raro, Bipolar y Porfiado, la banda liderada por Roberto Musso reemplazó las letras cargadas de ironías y humor por una serie de canciones reflexivas sobre el paso del tiempo que dieron paso al disco más maduro e introspectivo de la banda. Apenas se publicó “No llora”, los fanáticos de toda la vida no supieron cómo reaccionar, pero cuando llegaron “21 de septiembre” —tal vez la más dolorosa de las letras de Musso—, “De hielo", "Habla tu espejo” y “Roberto”, Habla tu espejo  terminó ganándose un merecido lugar entre sus trabajos más respetados.

2

“Salvavidas de hielo” (2017)

Inspirado en la frase “Cuanto más me limito, más me libro”, de Igor Stravinsky, Jorge Drexler logró uno de los mejores discos de su carrera. Bajo la premisa de grabar únicamente con las posibilidades de la voz y la guitarra (hasta la percusión fue grabada con el cuerpo del instrumento), el uruguayo radicado en España hizo de Salvavidas de hielo un álbum cálido, experimental y muy íntimo. Entre letras introspectivas, poesía fina y una voz que mejora en cada disco, este trabajo le dio paso a la gira más exitosa de su carrera y le otorgó tres Grammy Latino —incluido canción del año por “Telefonía”—. El oficio del cantautor está más vigente que nunca y Drexler está al frente.

1

“El éxodo” (2014)

Eté & Los Problems ya tenían dos buenos discos, pero El éxodo los elevó como banda en esa imposible escala piramidal del rock local. La refinación de un tipo de rock tan profundo como pop, tan salvaje como sensible; el uso óptimo de los recursos, y unas canciones buenísimas y originales (“El incendio”, “El éxodo”, “Objetos perdidos”, “La bandera” y así) fueron la fórmula de un trabajo impecable. Pero por encima de todo, está “Jordan”. Ernesto Tabárez escribió la mejor canción de la música popular uruguaya en los últimos años, un crossover entre un amor y la figura de Michael Jordan inalcanzable en las canchas de la NBA. Era un ejercicio imposible, y el resultado fue excelente.

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