Publicidad

"Hace falta el humor y no solo en la televisión"

Compartir esta noticia
Facundo Ponce De León

Llegó a la televisión a fines de 2004, y a pesar de que hubo años (entre 2008 y 2010) en que no estuvo, siempre ha sido una presencia que garantiza productos serios, simpatía, y una amabilidad que no evita la curiosidad.

Hoy vuelve con El Origen, el ciclo en el que repasa mitos y personajes nacionales. Esta vez son tres episodios que intentan buscar la historia y los fundamentos del humor industria nacional. Para eso habló con un montón de humoristas de la región.

—Conociendo la displicencia nacional hacia el archivo, debe haber sido difícil juntar material para tres programas sobre el humor televisivo uruguayo.

—Hay un problema grande de archivos en los canales y en el Estado. Y eso es algo del Río del Plata. El episodio dedicado a Cacho de la Cruz es el que tiene mejor archivo, pero para los otros nos tuvimos que esmerar mucho para conseguir cosas que no se hubieran visto. De Telecataplum, por ejemplo, el partido de Colón contra los indios se vio mil veces porque es lo único que queda. Tratamos de buscar alguna cosa más pero fue un problema grande.

—Y también pasa lo mismo en Argentina...

—Sí, no hay nada de las décadas de 1960, 1970, 1980. Ahí, cuando llega el videotape, se genera una consciencia de archivo un poco mayor. Pero está desordenado, y encima el archivo audiovisual está en una laguna legal; nunca está muy claro de quién es el archivo. En febrero me reuní con los gerentes de los canales públicos y privados pidiéndoles que nos abrieran los archivos porque sino el programa era imposible. Estará desorganizado pero lo poco que hay se guarda con mucho celo.

—Aun con esos inconvenientes, estos programas tienen mucha cosa inédita.

—Mucho video inédito y muchas fotografías inéditas cedidas por la familia DAngelo, la familia Almada y la familia Scheck.

—¿Y a qué conclusión llegaste después de tanto ver humor nacional?

—Una primera conclusión es que hace falta el humor. No sólo en la televisión clásica, abierta, sino el humor como construcción. Hoy sigue habiendo humor en muchas partes, pero lo que no hay es eso de darse tiempo para construir humor. Una de las cosas que te pasa al escuchar a estos tipos, es cómo se daban el tiempo para buscarle la vuelta al humor. Eso ya no está. El humor, además, tiene algo irreverente, y estamos en tiempos muy políticamente correctos y lleno de lugares comunes. Es muy raro porque hoy los viejos humoristas te dicen que es la degradación total, que todo es una guarangada, pero en realidad es casi al revés. Hoy es todo ascéptico: hay que tener cuidado con no meterse con los gais, los negros, los judíos, los ricos, los pobres. Pero las cosas que hacían aquellos humoristas eran irreverentes, muy zarpadas.

—Lo que decís es que ese respeto y esa altura que diferenciaba el humor uruguayo del argentino no es tan así.

—Me lo dijo Dady Brieva cuando yo lo pinchaba como uruguayo con que ellos eran los chabacanos. Ahí medio que se enoja y me dice: "escuchame, si vos ponés el sketch de la disquería hoy (Almada como un gay que coqueteaba con el empleado que hacía Espalter) vas en cana". Y lo mismo me dijo Don Francisco. Si lo hacés ya tenés eso de que es una caricatura injusta y discriminatoria. Tenían clase, tenían oficio y es verdad que no eran vulgares. Hoy o hay pura vulgaridad o está lo políticamente correcto.

—¿Y el gusto del público uruguayo se "aporteñizó"?

—Hay un poco de eso. Pichu Straneo dice que no, que cuando él viene de Argentina se da cuenta que el uruguayo sigue teniendo esa cosa de "haceme reír sin guarangadas". Lo que está claro es que a nivel de programación Argentina ha ganado espacio, y hay una invasión, es cierto, pero podríamos hacer una contrarrevolución.

—¿Hay opiniones diversas con respecto a esa decadencia?

—Hay quienes dicen que es el fin de los tiempos, que esto es la debacle total de la cultura, pero otros son optimistas.

—¿Y qué dicen los humoristas de ahora que entrevistás?

—Se sienten herederos de una tradición. A Marcel Keoroglian lo agarramos justo cuando estaba haciendo su segmento de las "noticias cantadas", por ejemplo. Todos tienen muy clara la función social del humor y de que se ha atomizado: están Gustaf, Rafa Cotelo, Keoroglian, Diego Del Grossi, y cada uno tiene su nicho. Y está claro que el humor está vigente, porque si ves la cartelera de un fin de semana hay un montón de shows de stand up. Y como no hay humor colectivo cada humorista se crea su universo.

—Hay un movimiento hacia la radio.

—Sí. Estamos preparando un capítulo para el año que viene de humor político, y no podemos hablar de eso sin mencionar a Darwin Desbocatti.

—¿Qué es lo más te gustó de tanto que viste?

—Para nosotros como equipo, de todo el material de archivo que tuvimos que ver, el humor de Cacho de la Cruz es el que más se sostiene con el tiempo y el que más nos hizo reír.

—Dijiste que sacaste varias conclusiones, contame otra.

—Una que me tiene sorprendido y que no quedó en el programa, es la relación entre humor y ternura. Aún en los cómicos más agresivos hay un elemento de ternura común a todas las personas que hacen humor.

—Este El Origen es un viaje en el tiempo a un mundo que ya no está.

—Es que hay una televisión abierta que ya no está: aquella que nos convocaba y nos cohesionaba y que terminó, por ejemplo, con la llegada del cable en la década de 1990 y ahora con internet. Y ahí se terminó esa cohesión. Lo que nos pasa a los que vimos a Ciclisto Pedales o a Julio Pedemonte es darnos cuenta de que en ese momento estábamos todos viendo eso. Y que ya no pasa.

Programa con debate

Este año, y quizás el próximo, El Origen estará dedicado exclusivamente al humor nacional. Esta temporada tendrá tres capítulos. El primero, el que se emite hoy, es "Telecataplum, el humor con distinción" que abarca de 1962 a 1968, a lo que se le suma el debate sobre una posible caída del humor en Uruguay hacia lo chabacano. El segundo programa es el elenco de Telecataplum en sus aventuras en Argentina y Chile, y después el debate sobre si el humor rioplatense es machista en una historia que termina con Showmatch. Finalmente, el último episodio es un homenaje a Cacho de la Cruz y el rol sobre el humorista en la sociedad. Sobre esas cosas hablan uruguayos, argentinos y hasta Don Francisco.

Perfil

Nombre:El Origen. Cuándo:Domingos a las 21:00.Dónde: La Tele.

El eterno femenino de una imaginativa pintora
Facundo Ponce De León

FACUNDO PONCE DE LEÓNFERNÁN CISNERO

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

televisiónel origen

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad