Ayer se estrenó la cuarta temporada de Bates Motel en Universal, serie que también se emite en Teledoce aunque allí va en su primera temporada. La serie vendría a ser una "precuela" de Psicosis, el clásico de Hitchock de 1960.

Norman Bates, el protagonista de aquella película, debe de ser uno de los villanos más memorables del cine. Anthony Perkins se encargó de darle vida a ese joven dominado por la presencia de su difunta madre. Lo convirtió en un clásico.

A partir de ese personaje, Anthony Cipriano, Carlton Cuse y Kerry Ehrin crearon Bates Motel, que fantasea sobre cómo pudo haber sido la infancia de Norman si hubiese nacido en esta época.

El Norman de Bates Motel tiene Iphone, amigas y va al liceo como cualquier chico de su edad. También entra en una especie de trance violento y habla como si fuera su madre. Luego de desmaya y no recuerda nada.

Bates Motel no tiene el nivel de Psicosis, obvio, pero tiene su encanto. Freddie Highmore (Norman) y Vega Farmiga (Norma) tienen una muy buena química en la pantalla y logran hacer creíble la relación retorcida que tienen ambos.

Los creadores de la serie decidieron introducirle algunos cambios para aggiornarla y desarrollar otra línea argumental. Bates Motel se desarrolla en un pueblo llamado White Pine Bay, donde la mayoría se dedica a explotar grandes plantíos de marihuana. Esto genera que los Bates no sean los únicos raros del pueblo y que los asesinatos sean corrientes. También incorporaron a Emma —amiga de Norman— y Dylan, su hermano. 

Regresa la serie que imagina el pasado de Norman Bates