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El director Steven Soderbergh volvió con la recomendable "Logan Lucky", disponible en Netflix

PABLO STARICCO

Steven Soderbergh dijo que se retiraría del cine. Afortunadamente el director no cumplió su promesa y regresó con Logan Lucky, una recomendable comedia criminal, disponible desde el miércoles en Netflix.

Si hay algo que Soderbergh sabe hacer, es narrar con clase cómo se hace un robo. Su trilogía de La gran estafa sigue siendo tan entretenida como sofisticada, gracias al visible talento del cineasta detrás de cámaras -además de dirigir, Soderbergh suele editar sus películas- y un elenco con un nivel de estrellato poco repetido en la última década.

Logan Lucky devuelve al director a una historia sobre un grupo de ladrones de buen corazón pero lo aleja de los casinos, los trajes y el carisma exuberante de la dupla de George Clooney y Brad Pitt.

En su lugar, tenemos a los actores Channing Tatum y Adam Driver, dos estrellas todavía en construcción, quienes interpretan a los hermanos Logan.

Como un par de trabajadores sin muchas luces de Carolina del Norte, los hermanos deciden cambiar su suerte de una vez por todas mediante el robo del dinero que corre en una competencia automovilística de Nascar, uno de los deportes más populares de Estados Unidos.

En ese entorno, una región sureña con una población poco instruida, Soderbergh cuenta un relato muy divertido pero también sentimental, cargado de personajes estrafalarios que enfrentan problemáticas cotidianas (la familia, el dinero, las relaciones) de la mejor manera que pueden: cometiendo varios crímenes.

Como si fuera un acto de magia, el robo —el motivo principal de la película— logra sus momentos más interesantes en su antesala. El director, de todas formas, se guarda cartas bajo su manga para sorprender en el tercer acto.

Con actuaciones irresistibles (Daniel Craig, el James Bond actual, interpreta a un experto en bombas desopilante), una banda sonora candente y varias sorpresas en la trama, Logan Lucky es un riqueza de película. Bienvenido de nuevo, Steven.