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El bien y el mal en un antihéroe medio villano

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Imagen promocional de "Venom"

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El jueves se estrena "Venom", la primera de Tom Hardy en el universo Marvel

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Venom es uno de los personajes más interesantes y complejos del universo Marvel, una usina de éxitos que abarca a los Avengers y todos sus prouctos derivados. Es el alter ego de Eddie Brock, que es interpretado por Tom Hardy, quien ya interpretó a otro personaje enmarañado, aunque bastante más malo: Bane en Batman, el caballero de la noche asciende. Hardy, además, fue Mad Max en su nueva reencarnación y un piloto británico (y de también de cara tapada, en Dunkerque. Venom se estrena este jueves en Uruguay.

Creado por el guionista David Michelinie y el artista Todd McFarlane para la editorial Marvel Comics, Venom tuvo su primera aparición en la revista Marvel Super Heroes: Secret Wars 8 que se lanzó en diciembre de 1984. Enseguida se convirtió en uno de los personajes más peligrosos y despiadados, y principal enemigo del Hombre Araña. Aunque si bien se lo catalogó como un supervillano, es uno de los ejemplos del antihéroe oscuro y violento, en la línea de Punisher y Spawn. O Deadpool sin los chistes.

Venom
Vea el trailer de "Venom", la nueva de Marvel que se estrena este jueves 

Eddie Brock es un periodista de investigación que había aparecido, algo deslucido en Spiderman 3; ahora tiene película solo para él. El Hombre Araña no aparece en Venom.

El director Ruben Fleischer (el de Zombieland) recurrió a dos cómics: Lethal Protector y Planet of the Symbiotes, aunque modificaron los personajes para crear este nuevo universo cinematográfico. De allí sacaron un par de conceptos (Brock como protector de los indigentes, y a Venom como su alter ego), una trama (Brock se entera que alguien hace experimentos con los indigentes y simbiontes una raza de “parásitos extraterrestres amorfos”. Que son feísimos.

Brock y Venom se disputan, además, el dominio del mismo cuerpo que tiene uno de esos parásitos extraterrestres. Así Brock, en lo ético, es muy flexible y no un villano. Por eso, ambas personalidades tienen que llegar a encontrarse a mitad del camino, o perecer en el intento. Venom no es ni héroe, ni villano, ambigüedad ética que comparte con todos los personajes.

En algún sentido, su personaje que lidia con dos demonios, emparenta a Venom con los hermanos Kray, los dos delincuentes ingleses que Hardy compuso en Leyenda: la profesión de la violencia.

“Me pareció fascinante ser Venom porque podía seguir con lo que dejé al interpretar a los gemelos”, dice Hardy en una entrevista distribuida por su distribuidora. “En Venom, pude hacerlo con la fantasía y la realidad. Venom tiene un apetito voraz y no se ajusta a ninguna regla humana. Es como el toque de Midas: tiene todo, pero no tiene nada. Los dos, Eddie y Venom, se necesitan el uno al otro. Si uno de ellos muere, mueren ambos. Son como una pareja dispareja. Uno mide más de dos metros y el otro es un periodista de investigación de estatura media que preferiría no treparse a los edificios.

De cierto modo, Eddie debe enfrentar el lado oscuro de su propia personalidad que el simbionte pone de manifiesto”, dijo el actor, que el año pasado produjo y protagonizó la excelente serie Taboo y que, se anunció volverá a interpretar a Max Rockatansky en Mad Max: The Wasteland que volverá a dirigir George Miller. Y si todo funciona bien, habrá Venom para rato.

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