Con Ciro Guerra, el gran ganador de los premios Platino.

Colombia celebra su poderío cinematográfico con la victoria arrasadora de El abrazo de la serpiente en los Premio Platino. Ciro Guerra, uno de sus directores más prolíficos y premiados, el único que recibió una nominación a los Oscar, adelantó sus planes para el futuro.

—Lo invitaron a ser miembro de la Academia de Hollywood, ¿cómo fue el recibimiento?

—La bienvenida fue muy efusiva, porque para ellos son muy importantes las películas que vienen fuera de Hollywood. Soy nuevo y estoy asombrado de la cantidad de actividades que nos ofrecen.

—¿En qué sentido cree que le será útil?

—Me interesa comprender cómo funciona su mecanismo de promoción, porque es lo que posicionó a su cine en el mundo. Creo que América Latina tiene mucho que aprender de eso.

—¿Ya recibió ofertas para rodar en el exterior?

—Sí, llegaron muchas ofertas. Muchas de Hollywood, incluso. Pero he leído varios guiones y es difícil encontrar material bueno, y además estoy filmando otra película en Colombia, que me llevó tres años de desarrollo.

—Le llevó cuatro años conseguir el dinero para rodar este film. ¿Cree que será más fácil en el norte?

—Lleva mucho tiempo también porque requieren presupuestos muy altos, entonces nunca sabés qué proyectos finalmente van a salir y cuáles no.

—Dijo alguna vez que el cine le permitió conocer su país, ¿le será difícil rodar fuera?

—Siento que las películas que más quiero hacer y las que mejor me salen están en Colombia. Pero ya me vinculé a varios proyectos internacionales porque me interesa explorar ese lado. Se abrió una puerta que no puedo desaprovechar.

—¿Aceptaría cambiar de género o estilo?

—Sí. El primer proyecto confirmado es de ciencia ficción y está en desarrollo.

—Bien distinto, entonces.

—En realidad no tanto. En Estados Unidos me dijeron que El abrazo de la serpiente tiene mucho del género de ciencia ficción "post-contacto", y estoy de acuerdo. La ciencia ficción y ciencias como la etnografía y la antropología son más cercanas entre ellas de lo que parecen a primera vista.

—¿Por qué considera que un film tan regional se convirtió en un éxito mundial?

—Siento que ahora hay apetito por aprender de las culturas indígenas, por volver a verlas y respetarlas. La humanidad se ha metido en una encrucijada y vemos crisis por todos lados. Creo que hay mucha gente interesada en buscar otra forma de ser humano.

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