ESTRENO

Firmada como una película de Federico Veiroj y Arauco Hernández, Así habló el cambista es la quinta película de Veiroj. Aunque comparte con el resto de su filmografía cierto tono apocado que evita los chisporroteos (aunque acá algunos hay), tiene una interesante reconstrucción de época y un personaje odioso que Daniel Hendler construye con destaque.

Basado en una novela de Juan E. Gruber, la películasigue la vida (desde mediados de la década de 1950 a mediados de la de 1970) del cambista del título, un arribista, ambicioso e inescrupuloso financista de la Ciudad Vieja. Tiene una esposa (Dolores Fonzi) resignada y distante, dos hijos y un universo por el que pasan sicarios brasileños, montoneros, militares argentinos y mucha, mucha plata. Todo le pasa con una impavidez pavorosa, lo que aporta algunos pasos de comedia asordinados pero divertidos (cuando debe recuperar una llave de la casa de un compinche muerto, por ejemplo).

Veiroj —con la fotografía de Arauco Hernández y el diseño de producción de Pablo Maestre Galli— construye un mundo cinematográfico de colores de madera y de grises, que aporta contenido a la narración y se apoya en una estética de cine clásico.

Y tiene, además, una actuación muy destacada de Hendler que, a base de prótesis (¡esos dientes!) y de un rostro que dice mucho sin decir nada, arma un cretino perfecto que es el centro de una película clásicamente atípica.