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Cómo arruinar el sueño americano

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El intelectual Noam Chomsky es un documental/dignóstico. Foto: Difusión
The Guardian

Las ideas de Noam Chomsky en primera persona en Netflix.

Si por un lado desaparecieron de lo que alguna vez pudo haber sido su habitat natural —la televisión por cable— los documentales están en pleno auge.

Pocas veces llegan al cine. Con suerte cuando están firmados por documentalistas con fama propia ya sea por la seriedad (Errol Morris) o la espectacularidad (Michael Moore) pero han encontrado una plataforma para difundirse a través de los servicios de streaming.

En Netflix por ejemplo, se estrenó esta semana Requiem for the American Dream ("Requien por el sueño americano") un documental de Peter Hutchinson, Kelly Nyks y Jared P. Scott, que tiene una sola idea: el lingüista, analista político y activista Noam Chomsky hablando a una cámara detallista sobre la inequidad en la economía estadounidense.

Es el mismo recurso (una primera persona rabiosa en un primer plano casi estático) que Morris utilizaba, por ejemplo, en The Fog of War, un "autoretrato" de Robert McNamarauno de los secretarios de Estado más poderosos que estuvo en Estados Unidos.

No es la primera vez que Chomsky —considerado uno de los grandes intelectuales de izquierda— y sus ideas son el centro de un documental. En 1992 fue el protagonista de Manufacturing Consent pero Requiem for the American Dream se presenta como la última gran entrevista a Chomsky; tiene 87 años pero sigue en actividad como una analista crítico del estado de la unión.

Dividido en 10 capítulos que reflejan cada uno de los principios de la inequidad y la concentración de poder, Chomsky despliega toda su artillería por un tema que le preocupa muchísimo: la diferencias sociales, los actos fallidos de la democracia y la transformación de una plutocracia que pasó de la industria a las finanzas. Da ejemplos concretos, presenta cifras y deja una sensación de desolación: estamos en manos de una casta financiera cuyo único fin es enriquecerse a costa nuestro.

El tono monocorde con el que Chomsky lanza sus verdades obliga a verlo atento y, más allá de algunas animaciones ingeniosas, Requiem for an American Dream es muy parecido a un audio libro.

El documental funciona como un elemento de debate en tiempos electorales en Estados Unidos. Para Chomsky, la democracia estadounidense está presa de un círculo vicioso provocado por las corporaciones financiando a la clase política.

Junto con Trabajo confidencial de Charles Ferguson (que ganó el Oscar y reveló los entretelones de la última crisis), Requiem for an American Dream pinta un panorama triste que nosotros mismo dejamos que llegara.

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El intelectual Noam Chomsky es un documental/dignóstico. Foto: Difusión

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