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"Yo creo que la cultura es infraestructura"

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Ricardo Ramón: un hombre organizado que gusta de la estética. Foto: A. Colmegna
Nota a Ricardo Ramon Jarne, Director del Centro Cultural de España, ND 20160216, foto Ariel Colmegna
Archivo El Pais

Es todo un personaje, habla con la gracia y soltura de tantos españoles; durante la entrevista, se levanta, va a buscar algo, vuelve, se vuelve a parar, no está quieto.

Pero a la hora de hablar, Ricardo Ramón Jarne, director del CCE, se expresa con claridad y franqueza, en este caso, sobre el panorama cultural uruguayo.

—¿Qué puede adelantar de la agenda del CCE?

—Ahora en abril tendremos el congreso mundial César Vallejo, el festival mundial de la poesía, un montón de actividades. Y vamos a inaugurar en plástica con el Premio Velázquez, que es Valcárcel Medina, uno de los súper grandes artistas que tenemos. Es una exposición que es un viaje en tren, y quiero aprovechar para darle protagonismo a nuestra estación, pobre olvidada, la Estación Artigas. Una joya arquitectónica. Porque aunque la exposición venga de afuera, siempre trato de vincularla a temas uruguayos. Cualquier ciudad del mundo se volvería loca por tener una estación de ese nivel.

—¿Este es un año difícil para la gestión cultural, dados los recortes que están habiendo?

—Bueno, los años difíciles para la gestión cultural son todos. Yo llevo veintitantos años en esto y nunca he tenido un año fácil. ¿Entiendes? Porque además, siempre y de alguna manera, la cultura es un poco como la niña pobre, sobre todo en los momentos de los recortes. Pero relativamente estamos muy acostumbrados. Creo que muchas veces los gobiernos no se dan cuenta que los recortes en cultura son también recortes en puestos de trabajo. La cultura no es un ente abstracto: de ella viven muchos trabajadores.

—¿A España el CCE le sale más caro o más barato que años anteriores?

—Tengo el mismo presupuesto que el año pasado y que el anterior. Es muy pequeño: son 130 mil euros para todo el año. Lo que pasa es que procuro que no se note. Con mucho dinero cualquiera hace gestión cultural. Cuando un gestor cultura muestra que es bueno, es cuando hay poco dinero.

—¿Qué te gustaría traer a CCE, o qué soñás con traer?

—Mira, a mí me dio mucha pena no poder traer a Nuria Espert. Ahora tenemos una posibilidad, porque va al festival de Bogotá: me gustaría que alguien me ayudara a que la gran Nuria se despidiera de Uruguay. Yo sería feliz. ¿Quién hay en el teatro español después de Margarita Xirgu? Yo en Buenos Aires pude ver a todas las actrices argentinas, de pie, llorando ante ella, me emocionó. Todavía se me ponen los pelos de punta. Es el reconocimiento a una grande.

—¿Qué es lo que más te gusta de Uruguay?

—Primero, lo cómoda que es esta ciudad, más cómoda no puede ser. Luego, no hay tanta actividad como en Buenos Aires, pero la actividad que hay es de calidad. En ciudades más grandes, hay cinco cosas a la vez y solo puedes ir a una: y aquí solo puedes ir a una, que está muy bien. Pero sí, es una ciudad con muchas cosas por hacer, sobre todo en el tema de patrimonio. Cuidada, sería una de las ciudades más bellas de América. Hasta los propios argentinos reconocen que el canon arquitectónico está en Montevideo. Hay que hacer un esfuerzo entre todos, para conservarlo y darlo a conocer en el exterior. Además, el marco cultural es muy importante: no es lo mismo trabajar por la cultura en una ciudad que lo tiene a hacerlo en otra que no.

—¿A veces el ego de los artistas y de los gestores no permite tanto trabajar en equipos más grandes?

—¿Has conocido en algún país un mundo cultural sin ego? No es posible. Pero el ego se puede manejar, porque cuando en la unión se ve un beneficio, la gente se plantea, ¿qué quiero ser, cola de león o cabeza de ratón? La pequeña chacra no es solamente un patrimonio uruguayo: las influencias, los amigotes, el círculo de cada uno. Por eso yo siempre busqué desde un principio que el CCE no se convirtiera en un club de los mismos para los mismos, que es lo que normalmente pasa con muchos centros culturales.

—Lo del Centro Cultural García Lorca, ¿cómo lo ves?

—Está parado: España puso el dinero que tuvo que poner en su momento. Creo que de alguna manera hay que sacarlo de ese impasse en el que está. Pero claro, nosotros como España hemos cumplido los compromisos que se habían pactado. Queda la siguiente parte. Es interesante que haya un centro cultural en Pocitos, que no esté todo concentrado en la misma zona. Pero yo más no te puedo decir. Me duele que esté así, porque ya lleva mucho tiempo en impasse. Financieramente España ya no puede ayudar. Nuestra parte está hecha. A mí siempre me da mucha pena ver una infraestructura cultural parada, porque yo creo que la cultura es infraestructura.

Perfil

Nombre:

Ricardo Ramón Jarne.

Detalle:

Doctor en Historia del Arte, especializado en Gestión Cultural en América Latina.

Museólogo, crítico de arte y gestor cultural, Ricardo Ramón lleva más de dos décadas trabajando en América Latina. Ahora hace dos años que está al frente del CCE montevideano, que ha buscado proyectar al resto del país.

"Lo que veo es que hay muy buenos profesionales en la gestión cultural pública en Uruguay. Yo tengo unos interlocutores que son estupendos: algunos de ellos son viejos compañeros de la gestión cultural de hace muchísimos años", señala Ramón.

"No me puedo quejar de nada. Estoy encantado a nivel de profesionales. Ahora, no sé si las instituciones públicas debería apoyar más a estos profesionales. Ahí no me meto porque soy extranjero", remata.

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Ricardo Ramón: un hombre organizado que gusta de la estética. Foto: A. Colmegna

Ricardo Ramón Jarne

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