En vacaciones, la lectura también es una opción de entretenimiento.

No hay vuelta, los libros infantiles son protagonistas en estas vacaciones de invierno. En la poblada cartelera de espectáculos infantiles para estas dos semanas, hay varias obras de teatro, un ballet y hasta una película basadas en historias creadas para los más chicos de la casa.

Así, varias propuestas partieron de la literatura. Allí están, por ejemplo, el Festivalondo (en Sala Verdi) con cuatro puestas en escena basadas en historias de Susana Olaondo, un fenómeno literario nacional que siempre gusta a los niños; Pateando Lunas (Teatro Stella) basada en la conocida novela de Roy Berocay sobre Mayte, una niña que prefiere jugar al fútbol con sus amigos, a jugar con su insoportable prima Esther. Berocay además está este año en Los cuentos de la selva (Auditorio Nacional), que está basado en tres cuentos de Horacio Quiroga y que tienen al literario Sapo Ruperto como su hilo conductor.

Y por primera vez en la cartelera de cine aparece una película basada en una novela infantil que, además, es de un escritor local. Se trata de Mi Mundial (en los complejos Grupocine, Life y Movie), la adaptación de la novela de Daniel Baldi sobre Tito, un prodigio con la pelota al que no le va tan bien en la escuela.La película se convirtió en un éxito de audiencia, vendiendo más de 10.000 entradas en los pocos días que lleva de estrenada.

Es que las historias para el público infantil han ido ganado un espacio en estos años, con divisiones propias dentro de las grandes editoriales y con su propia feria del libro, donde todos los años se presentan las novedades literarias y los autores son recibidos como celebridades por sus pequeños lectores.

Viviana Echeverría de Editorial Santillana sostiene que la literatura infantil ha crecido, "es una tendencia clarísima no sólo a nivel local, también en el mundo con el crecimiento de editoriales independientes. Se estableció una competencia y creo que hay una oferta importante y variada para el lector que pasa de publicaciones que vienen con el apoyo marketinero y ediciones de autores nacionales y propuestas de contenido con un perfil diferente", dice.

"Los libros infantiles tienen la temporada en el día del niño, vacaciones de julio, Navidad y el comienzo de clases. Esos son los momentos pico de los libros infantiles", reconoce, por su parte, Jimena Maresca de Editorial Planeta, quien también dice que esa área es la que "más se ha desarrollado en los últimos tiempos".

Además de autores como Ignacio Martínez, Olaondo, Berocay, Cecilia Curbelo, Federico Ivanier o Lucía Flores, también ha habido un crecimiento en esta área gracias a los youtubers, dice Maresca. "Eso va generando otras inquietudes en los chicos que solo tenían el teléfono y la computadora como formas de entretenimiento", dice. Entonces, más allá que la lectura pueda no ser óptima para el criterio de los adultos, es una forma para que los chicos se acerquen al libro, "y de un libro pasan a otro y así llegan a otros autores", dice Maresca.

Así, autores como Pamela Stupia, Germán Garmendia, Vegetta777 o Mariano Bondar han traspasado la pantalla del celular (y de YouTube) para convertirse en verdaderos fenómenos literarios.

Es que la literatura infantil, en muchos casos dista de ser literatura liviana, ya que responde, muchas veces, a dudas que tienen los chicos y que no se animan a hablarlo con los grandes. Como le ha sucedido a Curbelo, cuyos libros presentan la mirada de los niños (y adolescentes) sobre temas como el divorcio y las redes sociales. También como sucedió con el libro de Flores, El congreso de los feos, que aborda el tema del bullying, y que Maresca dice, tuvo una buena recepción en las actividades de algunas escuelas donde se presentó el libro con la autora.

"Hemos notado en las ventas un crecimiento y proyectamos que podemos subir más aún", dice Maresca. Es que los libros infantiles siempre se cuelan en los rankings que las librerías realizan cada año, superando a algunos best sellers para el público adulto. Ese crecimiento de oferta y demanda "lo ves en la feria del libro, que este año crecieron las ventas de manera significativa", dice Maresca.

Claro que el crecimiento no necesariamente se da en las vacaciones de invierno. Inés Frasca de Libruras (librería especializada en literatura infantil y juvenil y representante de la editorial Ekaré), dijo que si bien hay zafras, las vacaciones de julio no es uno de esos momentos. Los niños, en vacaciones de julio vienen "después de ver algún espectáculo y compran libros como un paseo que acompaña a un espectáculo, pero no es una zafra", dice.

Entre el público que llega a esa librería están los que piden recomendaciones y los que "vienen sin conocer nuestro material", y los que tienen a un escritor en mente, que generalmente piden autores nacionales, dice Frasca. Entre los géneros más pedidos se encuentra el humor, la aventura y los géneros que los muevan, y "sobre todo lo que más les gusta es compartirlos con otro", afirma Frasca.

Mario Firpo, de Bookshop, tiene una mirada similar sobre el tema. "Sube bastante la venta, sobre todo en los locales de los shoppings, de hecho nos preparamos para ello: cambiamos la exhibición y hay otro tipo de reposición", dice. Si bien en este período las ventas suben, si se compara con las zafras de las fiestas o el día del niño, la venta es menor. "Hay una movida distinta, incluso con lo que la gente busca", dice. Es que en vacaciones los grandes buscan algo para entretener al niño: libros de actividades, pegotines, mandalas para pintar, acertijos o adivinanzas. Mientras que en las otras zafras se buscan cosas más caras o elaboradas", dice Firpo.

Lo que no cambia es el vínculo que se genera entre grandes y chicos gracias a un libro. Eso, sin dudas, es lo que diferencia que un libro sea bien recibido, o no, por los chicos: que se lo lean con ganas, que se dedique tiempo y paciencia para compartir un momento juntos, eso es lo que le quedará a los niños en su memoria. Y además, entre tanta oferta para sacar a los niños a pasear, una tarde con un libro es una opción bien válida.

Cada librería tiene su propio ranking de los libros más vendidos, aunque en estas fechas se venden más libros para colorear y con actividades, que los de lectura.

Entre los más vendidos de Bookshop, a la cabeza están: Mandalas de princesas (Susaeta ediciones), seguido por Busca los animales y sus crías (Susaeta), Lee y crea (coeditado por Book- shop), La Casa de Mickey Mouse - Historias para aprender (The Novelty Book Company) y Mi pequeño cofre Frozen (coedición de Book- shop).

En Librería Pocho afirman que con motivo de los 20 años de Harry Potter, la primera entrega, La Piedra filosofal, volvió a venderse bien. Los otros más vendidos por estas fechas son los libros-álbum y la primera parte de la saga juvenil Los gatos guerreros de Erin Hunter (Ed. Salamandra).

...Sinfónico. Autor: Ignacio Martínez. Editorial: Planeta. Páginas: 75. Precio: 360 pesos.

Martínez es uno de los más prolíficos autores de libros para niños y jóvenes (la biografía de la solapa dice "más de 100). Acá cuenta la historia de un niño sordo que disfruta la música que ejecuta el mismísimo Mozart. "Este es un libro que prioriza la inclusión, donde el silencio y la música se encuentran en un vasto territorio y cada uno cumple su rol desde lugares diferentes", dice desde la contratapa.

El sueño de los peces.

Autores: Evelyn Aixalá y Roger Ycaza. Sello: Loqueleo. Editorial: Santillana. Páginas: 33.

El breve cuento de Evelyn Aixalá tiene como protagonista a Joaquín, un niño que se mezcla entre sueño y realidad después de una visión de la playa llena de peces muertos. Es un relato poético que desde la inocencia de un niño echa una mirada al medio ambiente, y viene acompañado de unas preciosas ilustraciones del ecuatoriano Roger Ycaza. Se sugiere para niños de seis años en adelante.

Autor: Ransom Riggs. Editorial: Crossbooks. Precio: 690 pesos.

Tercera y última parte de la saga de El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares, cuya primera parte fue llevada al cine por Tim Burton. Recomendada para preadolescentes, Ransom Riggs, el autor, tiene mucha imaginación para contar la historia de un niño con poderes extraños y su lucha para recuperar aquel hospicio detenido en el tiempo en la primera parte. Muy entretenido.

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