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Deseos y anhelos de un gran pianista uruguayo

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Uruguay for export: Graf, un virtuoso nacional por el mundo. Foto: Steve Sherman
Enrique Graf, pianista uruguayo residente en EEUU - PhotoCredit - Steve Sherman D:\Users\dborrelli\Desktop\650080.JPG
PhotoCredit - Steve Sherman

Enrique Graf estará el sábado en el Auditorio Adela Reta.

El reconocido pianista uruguayo de prestigio internacional Enrique Graf será el solista del concierto que este sábado 23 de julio se hará en la sala principal del Auditorio Nacional Adela Reta, con la Orquesta oficial bajo dirección de Martín García.

Y el programa redobla el interés del concierto: de Claude Debussy ejecutará el famoso Preludio para La siesta de un fauno, de Joseph Haydn el Concierto para piano N°. 11, de César Franck las Variaciones sinfónicas para piano y orquesta, cerrando con La Valse, de Maurice Ravel. Es a las 18.30 y las entradas se venden por TickAntel, desde $ 150 a $ 400.

"Exigencias técnicas tiene todo el repertorio: a veces algo que parece más fácil, como Haydn, se complica, pues es todo más expuesto y transparente, entonces no hay dónde esconderse. Haydn es muy diáfano y clásico, la claridad es fundamental. En cuanto Franck, como romántico, se usa mucho más el pedal, para mezclar sonidos y a veces diferentes armonías. Haydn se toca con los dedos más curvos, y Franck, más derechos, usando más los brazos, por una cuestión de variedad de sonidos. Por otro lado, emocionalmente la exigencia es una cuestión del momento de la actuación: que estés inspirado, con ganas de compartir, y no siempre se da", comentó a El País este virtuoso del teclado.

El repertorio que recorrerá el sábado está cargado de significado para el músico. "Yo actuare como solista en el concierto en Re para piano y orquesta de Haydn, que fue el primer concierto que toque, hace 45 años. Y la última vez que lo hice fue en 1990 en Nueva York, el día después que murió mi madre", evoca el artista, cuya última actuación con la Ossodre había sido nada menos que junto Nibya Mariño, en el Concierto para dos pianos de Poulenc.

Por contrapartida, Graf también se enfrentará a otra parte del programa nueva para su carrera, como estas variaciones sinfónicas de Franck. Luego el músico tiene agendada otra presentación en Montevideo, para el miércoles 7 de diciembre a las 19.30 en el Auditorio Nelly Goitiño, cuyas entradas ya están a la venta, en TickAntel, a $ 300. Y para el verano prepara un recital en la Fundación Atchugarry, en Manantiales, para el 20 de enero.

"No tengo favoritos", aclara Graf al ser consultado sobre qué partitura para piano siente más próxima, y agrega: "Por lo general son las obras que estoy tocando en el momento. En estos días, muchas obras de Chopin, varias de las cuales tocaré el 7 de diciembre para cerrar la temporada de música de cámara del Sodre", adelanta. Sin embargo, sí reconoce que no todas las composiciones representan la misma dificultad. "Dos de las obras más difíciles del repertorio para piano que he tocado son las sonatas para piano y violín de Strauss y casualmente la de Franck".

Pero además de un conocedor del piano, el artista es un gran conocedor del público, dada su larga trayectoria por múltiples escenarios. En ese aspecto, reconoce que un concierto, además de una actividad musical, es una instancia social. "Yo creo que los conciertos siempre han sido actividades sociales. Cuando los músicos, o la música, es excelente, a veces logramos inspirar al público a superarse ellos mismos, a desarrollar cualquier tarea que hagan, con la misma dedicación y devoción con la cual nosotros enfocamos la nuestra", reflexiona.

Graf vive actualmente en las afueras de Charleston, en Carolina del Sur. "Es una ciudad divina, antigua y muy bien conservada. El compositor Gian Carlo Menotti la eligió para hacer ahí el festival de Spoleto USA, hace 40 años, y eso le dio un impulso enorme. La ciudad, que estaba un poco venida abajo, se convirtió en un polo turístico, gracias a un festival artístico que dura dos semanas. Es una ciudad del tamaño de Salto, y atrae cuatro millones y medio de turistas por año. ¡Qué bueno sería hacer algo así en Montevideo!", remata el gran artista uruguayo.

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